Giancarlo Esposito, que ha encarnado a villanos en The Mandalorian, The Boys o la más reciente The Gentlemen, saltó a la fama como uno de los más carismáticos antagonistas de
Breaking Bad, una serie que ha definido como su particular "luz al final del túnel". Y es que, antes de interpretar a
Gus Fringe, el actor
estaba tan apurado económicamente que incluso llegó a pensar en contratar a alguien para que lo asesinara y permitir así para que sus hijos pudiesen cobrar el seguro de vida.