MADRID, 15 Oct. (CulturaOcio) - Han pasado 30 años desde que Pulp Fiction llegara a los cines estadounidenses, en octubre de 1994, si bien la cinta había visto por primera vez la luz en mayo de ese año en el Festival de Cannes, donde se hizo con la Palma de Oro. La película de Quentin Tarantino se convirtió casi de forma instantánea en un icono de la cultura pop, dejando grabada en la memoria del público varias escenas míticas. Entre ellas destaca el monólogo, pistola en mano, del personaje encarnado por Samuel L. Jackson. Una versión muy libre de un pasaje de la Biblia que el actor ha demostrado que, tres décadas después, sigue recordando a la perfección.