MADRID, 24 Dic. (CulturaOcio) -
Uno de los mayores atractivos de Avatar es todo el mundo de Pandora. El universo creado por James Cameron es muy rico en detalles y alberga infinidad de curiosidades. Una de ellas es el ciclo diurno, es decir, la cantidad de tiempo que duran los días y las noches en el gran satélite del planeta Polifemo.
Pandora tiene un tamaño similar al de la Tierra, pero no deja de ser una de las trece lunas de un gigantesco planeta gaseoso. Además, su sistema planetario cuenta no con uno, sino con hasta dos soles. El principal es Alfa Centauri B, pero también recibe luz de Alfa Centauri A durante una parte del año polifeno.
La exposición constante a Alfa Centauri B hace que la estrella aparezca en los cielos de Pandora por las noches durante la mitad del año y por los días durante la otra mitad. El primero de los dos casos provoca que en ese tiempo la oscuridad en la luna nunca sea total. De acuerdo a algunas webs y wikis sobre la franquicia, estas noches se asemejarían a los atardeceres de la Tierra.
En la otra mitad del año, cuando la estrella ilumina los días de Pandora, las noches siguen contando con algo de luz. Esta es reflejada tanto por el propio Polifemo como por el resto de lunas del planeta. De hecho, apenas existen noches totales en Pandora. Estas únicamente ocurren cuando Polifemo eclipsa a Alfa Centauri B. Un proceso que tan solo duraría unos 100 minutos.
Además, cuando Alfa Centauri A hace acto de presencia, los efectos de la otra estrella quedan mucho más atenuados por su menor tamaño. Esta complejidad hace que no exista un calendario preciso sobre los ciclos día-noche de Pandora, que varían enormemente dependiendo de su posición en cada momento. En Avatar: El sentido del agua sí aparece una noche completa en el último tercio, algo que, dados los datos que se tienen del satélite, es bastante inusual.
