MADRID, 5 Jun. (CulturaOcio) -
Tres años después de los sucesos de la primera 'Jurassic World', que terminó con el colapso del Parque y la Isla Nublar abandonada por los humanos y dominada por los dinosaurios, Chris Pratt y Bryce Dallas Howard regresan a la saga jurásica. Lo hacen con 'Jurassic World: El Reino Caído', un filme que llega este jueves a los cines dirigido por el español Juan Antonio Bayona al que ambos actores definen como "un maestro del suspense".
Y es que la secuela de Jurassic World explora el lado más terrorífico de los dinosaurios en un filme en el que la aventura y la acción dejan paso a una segunda parte marcada por el suspense y el terror.
"Bayona es un cineasta magnífico y su aportación a esta saga es realmente fantástica. Es un maestro del suspense. Además le encanta hacer películas y le encanta ver películas y eso se nota", señala Pratt en una entrevista concedida a CulturaOcio.com durante la visita de ambos actores a Madrid para presentar la película.
El protagonista de la saga no duda en afirmar que el cineasta catalán es el "director ideal" para esta ya quinta entrega de la franquicia jurásica que, apunta Bryce Dallas Howard, lleva "más allá la aventura y el terror" buscando un difícil "equilibrio" entre los dos elementos, el miedo más primario y la emoción.
En el tiempo transcurrido entre ambas películas Claire Dearing (Dallas Howard) ha pasado de dirigir el parque que explotaba a los animales a ser una activa defensora de los derechos de los dinosaurios para evitar su extinción en la Isla, mientras que Owen Grady (Pratt), el adiestrador de velociraptores, vive alejado de todo y de todos.
Ambos tendrán que volver a la Isla Nublar para intentar salvar a los ejemplares que fueron abandonados allí y que se enfrentan a un desastre que podría volver a acabar con ellos siglos después.
Una nueva aventura en la que ambos personajes "están preparados" para lo que van a afrontar, apunta Dallas Howard, lo que explica que esta ocasión su Claire no tenga que correr por la jungla con tacones.
Aquella fue una de las secuencias más comentadas de la primera película, algo que no olvida el director de aquel filme y guionista de este, Colin Trevorrow. "Cuando íbamos a empezar a rodar la segunda película me mandó un mensaje: 'Sin tacones en 2018'", confiesa entre risas.