MADRID, 14 Abr. (CulturaOcio) -
Desde su estreno en Netflix, Chupa, el nuevo filme de Jonas Cuarón, se coló rápidamente entre lo más visto de la plataforma. La cinta relata la historia de Alex, un niño que, durante una visita a su familia en México, adopta a un pequeño chupacabras escondido en el cobertizo de su abuelo. Un filme que parte de un mito mucho más oscuro y sanguinario que sí existe en el mundo real, lo que ha hecho que no sean pocos los espectadores que se peguntan: ¿Cómo surgió y qué hay de real en la leyenda del Chupacabras?
El Chupacabras es a grandes rasgos una suerte de monstruo que se alimenta de la sangre de otros animales y del que se empezó a tener constancia en la década de los 90 en distintas partes del mundo, después de un primer avistamiento en Puerto Rico. Como señala National Geographic, aunque sus descripciones físicas varían, "comúnmente se describe como una criatura pesada, del tamaño de un oso pequeño y con una hilera de espinas abarcando desde el cuello hasta la base de la cola".
Según indica el medio, los científicos consideran que los chupacabras son en realidad coyotes con sarna. Barry OConnor, profesor emérito de la Universidad de Michigan especializado en ácaros parásitos, explicó a TODAY.com que los coyotes afectados de sarna sarcóptica tienen más dificultades para cazar a sus presas habituales debido a los efectos de la enfermedad, que puede provocarles picores, hacer que se les caiga el pelo, que su piel se vuelva gruesa y costrosa y que aparezcan llagas dolorosas.
"Si un depredador así es incapaz de cazar a su presa de manera normal, irá tras cualquier cosa que pueda", afirma. "Si un perro doméstico, un gato, una oveja, lo que sea, está disponible y no puede escapar, entonces lo cogerán e intentarán matarlo", explica para tratar de justificar los supuestos avistamientos de chupacabras atacando a otros animales alrededor del mundo. En cuanto a que los chupacabras tengan colmillos, OConner dice que otra de las consecuencias de la sarna es que la piel alrededor de la cara y la boca se tensa y se retira del labio, dejando al descubierto los dientes.
Pero, respondiendo a la pregunta inicial, lo cierto es que Chupa no está basada en una historia real. Tampoco en un libro, a pesar de su trama llena de aventuras. Como señala de Cinemaholic, la película dirigida por Jonás Cuarón -quien dirigirá próximamente a Bad Bunny en El Muerto para Marvel y es hijo del oscarizado Alfonso Cuarón- parte de un concepto original de Brendan Bellomo y del equipo de guionistas, formado por Marcus Rinehart, Sean Kennedy Moore y Joe Barnathan.
Obviamente se inspiraron en la mencionada historia del Chupacabras, cuya monstruosa existencia -exagerada en el boca a boca- aún no se ha demostrado, pero dándole un tratamiento mucho más de aventura familiar al filme. Cuarón, quien creció en México en los 90, ha vivido de cerca la leyenda del Chupacabras, una criatura que fue protagonista de varios capítulos de la popular serie Expediente X. En este sentido, el director también ha señalado en varias ocasiones que tiene como referentes a cintas clásicas como ET, Los Goonies o Gremlins.
"Obviamente era una criatura terrorífica, pero siempre hubo algo emocionante en esas historias que planteaban la posibilidad de que hubiera magia ahí", explicó Cuarón en una entrevista concedida a Remezcla sobre sus primeros recuerdos del mito. "A diferencia de leyendas clásicas como Bigfoot y el monstruo del Lago Ness, el hecho de que el Chupacabras fuera una leyenda nueva cuando yo era niño lo hacía más creíble", añadió el director.