MADRID, 16 May. (CulturaOcio) -
Con Doctor Strange en el Multiverso de la Locura arrasando en cines, su director, Sam Raimi, quiere traer de vuelta a uno de los personajes más icónicos de su filmografía: Darkman. El antihéroe que encarnó Liam Neeson en 1990, y que contó posteriormente con dos entregas más, podría regresar con una nueva entrega.
Según informa The Wrap, aunque por el momento no hay confirmación oficial, Universal Pictures está interesada en una nueva entrega, de la franquicia que, a su vez, sería una secuela directa de la saga creada por el realizador de Posesión Infernal.
"Sí. Universal está interesada en una secuela de 'Darkman'. De hecho, ya hay un productor adjunto", admitió Raimi en declaraciones al medio. "Todavía no sé nada sobre la historia ni me he adentrado en ella, he estado muy ocupado [con Doctor Strange en el Multiverso de la Locura]. Pero me parece genial", prosiguió el realizador.
No obstante, cabe recordar que esta, no es la primera vez que se intenta traer de vuelta al antihéroe encarnado por Liam Neeson. De hecho, Raimi, admitió que, de haber cosechado un mayor éxito hubieran continuado con su plan inicial para continuar con la franquicia.
Así mismo, también confesó que estaría más que encantado de contar de nuevo con Neeson en esta secuela, retomando su rol como el doctor Payton Westlake/Darkman: "no sé si lo haría, pero sería fabuloso".
Antes de adentrarse en el rodaje de Darkman, Raimi estuvo intentando adquirir sin éxito los derechos de The Phantom, El hombre enmascarado, el héroe aventurero creado en 1936 por Lee Falk. Tras el fallido intento del realizador por hacerse con la licencia del personaje, en lugar de resignarse, decidió lanzarse a llevar a cabo su propio superhéroe.
El resultado de esta atrevida decisión, fue que, inspirado por los clásicos monstruos de Universal Pictures, creó Darkman, una historia de venganza protagonizada por Liam Neeson y Frances McDormand.
La cinta de 1990 seguía los pasos de Neeson como el doctor Peyton Westlake, quién se encuentra desarrollando un prototipo de piel sintética para ayudar a las personas que sufren de graves quemaduras. Y, a pesar de sus constantes esfuerzos, sus progresos son truncados en cada intento, puesto que no logra que duren más de 90 minutos.
Sin embargo, cuando unos delincuentes destruyen su laboratorio con él dentro, sufre un brutal accidente que lo deja al límite de la muerte, pero logra sobrevivir. Decidido a emplear sus descubrimientos con la piel sintética en sí mismo, y con una especial habilidad para cambiar de aspecto gracias a ello, planea su implacable venganza contra aquellos que le atacaron.
Aunque fue Neeson quien encarnó durante toda la película al camaleónico antihéroe, su final contó con la presencia de un joven Bruce Campbell. Él es el último rostro que Westlake adopta después de que decida mezclarse entre la muchedumbre de las abarrotadas calles, perdiéndose entre ellos diciendo su emblemática frase. "Ahora soy todos y ninguno. Estoy en todas partes y en ninguna, llamadme... Darkman".
Unas palabras con las que, además de aludir a sus excepcionales dotes para los disfraces, también invitaba a los espectadores a nuevas aventuras del personaje que acechaba a los malvados, pudiendo ser quien él quisiera y así truncar sus planes.
A pesar de que su recaudación en los cines fue modesta, las ganancias le permitieron a Sam Raimi poner en marcha varios cómics publicados por Marvel, videojuegos, figuras de acción y dos secuelas directas a vídeo: Darkman II, El regreso de Durant y Darkman III, titulada, Muere Darkman, muere.
Tras haber encarnado al personaje en la primera película, en las siguientes entregas Neeson, que aún no se había convertido en la rutilante estrella que sería tan solo unos años después, fue sustituido por Arnold Vosloo. Un actor que tres años más tarde lograría alzarse con la fama interpretando a Inhotep, el gran antagonista de La Momia, el filme de Stephen Sommers protagonizado por Brendan Fraser en 1999.