MADRID, 7 Abr. (EDIZIONES)
Netflix será el encargado de desarrollar la adaptación cinematográfica de Death Note. La plataforma de entretenimiento se ha mostrado muy interesada en hacerse con los derechos del proyecto, después de que Warner decidiera no seguir adelante con la producción.
Según publica The Wrap, Netflix se encuentra negociando con el cineasta Adam Wingard para llevar a cabo la adaptación hollywoodiense del popular manga japonés Death Note. El servicio de streaming tiene ya grandes planes para esta nueva versión y quiere fichar al actor Keith Stanfield (Straight Outta Compton) que se uniría al reparto liderado por Nat Wolff (Ciudades de papel, Bajo la misma estrella) y Margaret Qualley (The Leftovers).
Warner, que tenía previsto comenzar el rodaje de Death Note esta primavera, decidió no continuar con el proyecto y dejó vía libre para que Wingard encontrara un nuevo estudio. Fue entonces cuando Netflix se comprometió a llevar a cabo la película, siempre y cuando mantuvieran las negociaciones en exclusiva con ellos. Al parecer, fuentes cercanas a las conversaciones aseguran que el acuerdo se cerrará pronto.
El proyecto seguirá con con Dan Lin, Jason Hoffs, Roy Lee y Masi Oka como productores ejecutivos y con el guionista Jeremy Slater (Cuatro Fantásticos).
SEGUNDA ADAPTACIÓN CINEMATOGRÁFICA
La película se centrará en un joven (Wolff) que encuentra un cuaderno sobrenatural que permite matar a cualquier persona escribiendo su nombre en él. El personaje, conocido por todos los fans del manga publicado por Tsugumi Ohba y Takesi Obata entre 2003 y 2006, tendrá que enfrentarse a la ley tras haber intentado hacer justicia por cuenta propia.
No es la primera vez que Death Note dará el salto a la gran pantalla ya que en 2006 se estrenó una versión capitaneada por el director japonés Shuhuke Kaneko. La duda ahora es comprobar si la versión 'made in Hollywood' conseguirá satisfacer a los fans más incondicionales de este manga y la convertirán en un éxito en taquilla.
