MADRID, 30 May. (CulturaOcio) -
Emilia Clarke ya sabe lo que es desnudarse en pantalla, pues así lo exige su papel como Daenerys Targaryen en Juego de tronos, pero parece que la cantidad de escenas de este tipo que exigía el guion de 50 Sombras de Grey le hicieron rechazar el papel de Anastasia Steele.
Una vez más, Emilia Clarke ha vuelto a explicar las razones que le llevaron a rechazar el papel protagónico de la adaptación cinematográfica de la trilogía erótica de E.L. James, 50 Sombras de Grey, en una entrevista con Marie Claire.
El principal motivo fue el "encasillamiento", pues la intérprete no parecer estar dispuesta a quedar relegada a una actriz conocida solamente por sus desnudos ante las cámaras.
"Tenía muchas ganas de trabajar con Sam Taylor-Johnson, porque es increíble. Pero, en la película, había gran cantidad de desnudos y muy explícitos", alegaba Emilia Clarke.
La actriz continúa su razonamiento explicando: "Nunca voy a decir que no voy a hacer desnudos, porque ya los he hecho, pero pensé que podría quedar atrapada en este tipo de papeles".
50 Sombras de Grey pretende seguir cosechando éxitos con su secuela, 50 sombras más oscuras (Fifty Shades Darker), que llegará a los cines en febrero de 2017.
Mientras que la última entrega de la saga, 50 sombras liberadas, se estrenará el día de San Valentín de 2018.
Por el momento, los seguidores de Emilia Clarke podrán seguir disfrutando de las aventuras de su personaje en Juego de tronos con Causa Austera, el próximo episodio de la serie, que verá la luz el domingo 31 de mayo en HBO y unas horas después en Canal+ en España.
GREY, A POR OTRO TAQUILLAZO
50 sombras más oscuras buscará repetir el éxito de la primera entrega de la saga protagonizada por Dakota Johnson y Jamie Dornan, que ha recaudado hasta la fecha 568 millones de dólares en todo el mundo.
De momento se desconoce cuándo comenzará el rodaje de 50 sombras más oscuras, pero algunos rumores apuntan a que debería empezar a comienzos de 2016, para poder llegar a la fecha de estreno prevista.
Será Niall Leonard, el marido de la autora, quien se encargará del libreto de la segunda entrega de la saga. En cuanto al director, Universal se tendrá que poner manos a la obra para encontrar el sustituto de Sam Taylor-Johnson.
