MADRID, 22 Jun. (CulturaOcio) -
Ian Holm, actor conocido por su papel de Bilbo en la saga El señor de los anillos, falleció el pasado 19 de junio a los 88 años. La noticia ha conmocionado a los fans de la franquicia y también al equipo, tal como evidencia la carta de despedida que Peter Jackson dedicó al intérprete.
El director colgó la emotiva misiva en Facebook, asegurando que estaba "muy triste" por el fallecimiento de Holm, un hombre "encantador y generoso. Tranquilo, pero descarado, con un brillo encantador en sus ojos".
"A principios de 2000, antes de comenzar a filmar nuestras escenas de Bilbo para La comunidad del anillo, yo estaba nervioso por trabajar con un actor tan querido, pero inmediatamente me tranquilizó. De pie en Bolsón Cerrado el primer día, antes de que las cámaras comenzaran a rodar, me llevó a un lado y dijo que probaría cosas diferentes en cada toma, pero que no debería alarmarme. Si después de cinco o seis tomas no me había dado lo que necesitaba, entonces, por supuesto, debería darle unas instrucciones específicas", relató el director.
"Eso es exactamente lo que hicimos. Pero increíblemente, sus variadas actuaciones fueron maravillosas. Raramente necesitaba instrucciones. Nos dio una increíble variedad de opciones para elegir en la sala de montaje", agregó.
Jackson también rememoró la ocasión en que Holm tenía que rodar una escena con un grupo de niños y captar su atención hasta que consiguieran la toma que querían. "Comenzamos filmando la actuación de Ian contando la historia, pero también necesitábamos ángulos en los que los niños reaccionaran a varios momentos dramáticos. Pero los niños pequeños se aburren muy rápido, y Ian y yo rápidamente nos dimos cuenta de que no podían escuchar la misma historia una y otra vez. Sugerí que para mantener la atención de los niños, él debería hacer que la historia fuera un poco diferente en cada toma, agregando giros adicionales, inventando cosas, siempre y cuando nos diera la esencia de lo que estaba en el guion. Le dije que no se preocupara y que lo resolvería en la sala de montaje", apuntó.
"Sin embargo, también necesitábamos que los niños permanecieran en su sitio mientras movíamos rápidamente las cámaras, de un ángulo a otro. En un set de filmación, rápidamente significa 15 o 20 minutos. Mientras esto sucedía, y no había cámaras rodando, le susurré a Ian que iba a tener que mantenerlos entretenidos. Sugerí amablemente que les contara otras historias entre tomas. Y eso es exactamente lo que hizo. Después de un par de horas, filmamos todo lo que necesitábamos", relató.
El neozelandés también confesó que intentó rodar con Holm de nuevo para El Hobbit, propuesta que rechazó debido a su estado de salud. "Cené con Ian y su esposa Sophie en Londres y él nos dijo que lo sentía mucho, pero que no podía hacerlo. Además de nuestro shock, nos contó que le habían diagnosticado Parkinson y que ya no podía memorizar sus frases. Tenía dificultades para caminar y no podía viajar a Nueva Zelanda", desveló.
Pero Jackson no se rindió y le sugirió que, en lugar de desplazarse hasta Nueva Zelanda, podría rodar sus escenas en Londres, donde residía. "Al final de la cena, asintió lentamente y dijo: 'Sí, creo que podría hacer eso'. Pero yo sabía que solo lo estaba haciendo como un favor para mí, le cogí las manos y se lo agradecí con lágrimas en los ojos", aseguró.
"Comenzamos a filmar en Nueva Zelanda con Martin Freeman como el joven Bilbo. Martin admiraba enormemente a Ian Holm pero nunca lo había conocido. Sin embargo, Martin acordó usar maquillaje protésico para interpretar a Ian Holm en el rol del viejo Bilbo y capturó muy bien sus gestos. Un par de meses después regresamos a Londres y filmamos las escenas de Ian con un pequeño equipo", narró.
Según el director, durante este rodaje de El Hobbit en Londres Holm se hizo amigo de Elijah Wood. "Era un actor maravilloso ofreciendo su última actuación. Fue increíblemente valiente por su parte hacer eso, y muy emotivo para quienes lo presenciaron. Siempre estaremos enormemente agradecidos con Ian por hacer eso", admitió.
Cuando terminó el rodaje, Jackson lo celebró cenando con Holm y su esposa, una velada "llena de humor y diversión" en la que descubrió que ambos tenían un interés común por la figura de Napoleón. Posteriormente, cuando se estrenó la cinta, Martin Freeman tuvo por fin la oportunidad de conocer a Holm. "Ver a Ian Holm actuar me enseñó mucho. Fue un privilegio trabajar con él y una bendición conocerlo. Siempre me han encantado las secuencias finales de Ian en El retorno de rey", dijo el director. "Hasta siempre, querido Bilbo. Buen viaje, querido Ian", concluye Jackson.