MADRID, 19 Jun. (CulturaOcio) -
Del Revés 2 (Intensamente 2 en Latinoamérica, Inside Out 2 en su título original) ya ha llegado a los cines. Pixar regresa a con la secuela de una de sus películas más aclamadas y aplaudidas de su historia. Y la continuación del filme que ganó el Oscar al mejor filme de animación en 2015 también ha recibido grandes elogios. Y es que, si la primera se centraba en la mente de los niños, esta disecciona la psicología de los adolescentes, mucho más compleja y llena de nuevas emociones.
((ATENCIÓN: ESTA NOTICIA CONTIENE SPOILERS))
Durante toda la película se muestra cómo Ansiedad, uno de los nuevos personajes que se desarrollan en la cabeza de Riley, trata de tomar el control. Su plan es convertir a la niña en "lo que debería ser", rechazando la identidad que Alegría y el resto de emociones primarias habían ido formando con los años.
Para ello destierra a las protagonistas de la primera película y arranca de cuajo esa identidad original, construyendo un sistema de valores y creencias nuevo en Riley. Pero al final todo se le va de las manos y esa identidad se resume en que la niña piensa que vale lo suficiente.
Cuando Alegría, Ira y compañía consiguen volver a la central, Ansiedad está totalmente fuera de sí, paralizada y habiéndole provocado un brutal ataque de ansiedad a Riley. La emoción amarilla se ve obligada a actuar y, lejos de alejar a Ansiedad, trata de comprenderla y ayudarla, uniéndose de nuevo.
Con ambos equipos de emociones juntos, todos consiguen arrancar la identidad generada por Ansiedad. Pero entonces Alegría comprende que no puede restaurar la anterior, pues la había formado únicamente en base a buenos recuerdos. Riley es mucho más que eso, es todas sus vivencias. Y, puesto que el torrente de malos recuerdos había llegado a al sistema de valores y creencias, poco a poco estos empiezan a mezclarse con los buenos recuerdos.
De todo ello, al final, emerge una nueva identidad. Una que combina los aspectos más positivos de Riley, como su amabilidad y su sentido de la amistad. Pero también los aspectos negativos, como no creerse suficiente. Todas las emociones optan por abrazar esa nueva identidad y, así, el ataque de ansiedad de Riley termina.
PASO HACIA LA MADUREZ
La niña acaba de dar un paso vital en su vida. Su identidad no es algo fijo e inamovible, sino que es moldeable y adaptable. Es un fiel reflejo de todas las emociones, contradictorias y a la vez consistentes, que habitan dentro de ella. Al fin, las emociones viejas y las nuevas han formado un único grupo, una unidad. Riley ha madurado.
En el exterior, una vez que la joven ha comprendido estas valiosas lecciones sobre aceptarse a sí misma, todo resulta mucho más sencillo. Lo primero que hace es disculparse con sus amigas de toda la vida por haberlas dejado de lado. Ellas lo aceptan y en los compases finales se muestra cómo, pese a estar en otro instituto, le siguen enviando mensajes. Un detalle que evidencia que su amistad perdura. Además, Riley no está sola, pues la pandilla de Val la ha integrado como una más.
En ese momento llegan las decisiones finales de la entrenadora sobre quién formará parte del equipo de hockey. Pero ahora Riley ha asumido que, pase lo que pase, no hay de qué preocuparse. Ella sabe quién es, sabe que la gente de su alrededor, tanto sus nuevas amigas como las viejas, están con ella y la quieren por cómo es. Y si no entra en el equipo, siempre podrá intentarlo al año siguiente, no es el fin del mundo, como vaticinaba Ansiedad.
Por eso, aunque al abrir el mensaje Riley esboza una sonrisa, en realidad en Del Revés 2 (Inside Out 2) no se desvela si realmente ha entrado o no. El mensaje de la película va mucho más allá de eso, va de abrazar todas las emociones y construir una identidad en base a ellas con la que la persona se sienta a gusto y en sintonía. Riley, como cualquier adolescente, al fin lo ha conseguido.