MADRID, 10 Jun. (CulturaOcio) -
Arnold, el documental sobre la vida de Arnold Schwarzenegger, ya está en Netflix. Y por uno de sus episodios se ha dejado caer James Cameron, que ha revelado la discusión que mantuvo con el protagonista de Terminator cuando el legendario actor austríaco se negó a pronunciar una de las frases más icónicas de la película.
Schwarzenegger ha interpretado a muchos personajes como los de John Matrix de Commando, Dutch en Depredador o Jack Slater en El último gran héroe. Aunque, fuera de toda duda, los más celebrados por los fans son Coman y el del implacable cyborg T-800 en la saga de Terminator.
Dirigida por Cameron, la película dejó para la posterioridad una frase que aún resuena entre los fans: "Volveré". Sin embargo, a Schwarzenegger no le convencía demasiado que su personaje la pronunciase, lo que le valió una discusión con el cineasta durante el rodaje de Terminator en 1984.
Según recoge Insider, Cameron recordó en uno de los episodios de Arnold como el austríaco renegaba de la línea de diálogo que escribió para su personaje: "I'll back" (Volveré). "En algún momento en medio del rodaje nos encontramos haciendo esta escena en la comisaría de policía. La frase es 'Volveré'. No pretendía ser un gran momento. Tenía que ser, literalmente, "No hay problema, volveré". Por alguna razón, Arnold no dijo: 'Volveré'. Le dije: De acuerdo, di simplemente 'Volveré'. Haz que sea sencillo", confesó Cameron en el episodio de Arnold.
Sin embargo, para el austríaco, que debía pronunciar la frase durante la escena en la que dirigía a la policía, sonaba chistosa y quería que sonase de manera más robótica, por lo que decidió pronunciar I will be Back en lugar de I'll back. El propio Schwarzenegger recuerda en su documental la sofocada respuesta que el director le dio después: "Y [Cameron] dice: '¿Eres el guionista?'. Y yo le respondí: 'No', y me dijo: 'Pues no me digas cómo cojones tengo que escribir'".
Pese a todo, Schwarzenegger, que también ha estrenado Fubar, su nueva serie para Netflix, terminó reconociendo que se encontraba equivocado y la frase de Cameron para su personaje era buena. Siete años después del éxito alcanzado por la primera película de Terminator, Cameron estrenó su secuela, El juicio final, que de nuevo con Schwarzenegger como el pétreo T-800 y convertido en el bueno de la historia, consagró aún más al actor como estrella del cine de acción.