MADRID, 4 Ene. (CulturaOcio) -
Una de las sensaciones de El ascenso de Skywalker fue el inesperado regreso del Emperador Palpatine, uno de los grandes villanos de la franquicia galáctica. Un regreso, el del personaje, que George Lucas no habría hecho nunca, al menos según la opinión de Ian McDiarmid, actor que encarna al Emperador.
Así lo explicó el intérprete, preguntado por Digital Spy acerca de su reacción al enterarse de la vuelta de su personaje. "¡Pensaba que estaba muerto!". "Pensaba que estaba muerto porque cuando hicimos El retorno del Jedi, lo estaba. Y pregunté, 'Oh, ¿volverá?', y [George Lucas] me dijo 'No, está muerto'. Así que lo acepté", señaló.
"Pero claro, tampoco sabía que iba a hacer las precuelas, así que en cierto sentido no estaba muerto, porque cuando revisitamos al personaje era un hombre joven. Pero me quedé verdaderamente atónito por esto", indicó el actor tras la aparición de su personaje en el cierre de la saga Skywalker.
La vuelta de Palpatine estaba más que meditada, como explicó anteriormente Kathleen Kennedy, después de que el personaje muriera en El retorno del Jedi a manos de Darth Vader. La primera aparición del personaje fue como un holograma en El imperio contraataca, pero también fue uno de los personajes clave de las precuelas de George Lucas.
Así, El ascenso de Skywalker cierra definitivamente la saga de la familia Skywalker iniciada en 1977 con Una nueva esperanza. La cinta ha conseguido ya más de 815 millones de dólares en todo el mundo, aunque aún está lejos de las cifras de recaudación de sus predecesoras: mientras que El despertar de la Fuerza consiguió 2.068 millones de dólares, Los últimos Jedi recaudó unos 1.300 millones.