MADRID, 4 May. (EDIZIONES - Rodrigo Moreno Quicios) -
Ahora que la Fuerza está presente, al menos, una vez al año en los cines, convierne hacer memoria y elegir bando. Hay muchas variables a tener en cuenta a la hora de decidir si unirse a la facción luminosa de la Fuerza o abrazar el Lado Oscuro, pero entre los argumentos más persuasivos hay uno que jamás pasa desapercibido: el bando que tenga los mejores sables láser es sin duda el más seductor.
La espada como signo distintivo del héroe -o del villano- no es ningún concepto revolucionario. El rey Arturo tenía a Excalibur y, si tomamos el texto literalmente, la Tizona del Cid Campeador también parecía poseer algún tipo de poder especial.
Sin embargo, en el mundo de la ciencia-ficción estas armas tardaron un poco más en llegar. Fue cuando Isaac Asimov se sacó la serie Lucky Starr de la chistera que la espada láser pasó a formar parte de la cultura pop. Después llegaron George Lucas y su Star Wars.
Tanto los Jedis como los Sith emplean de forma muy distinta sus espadas. Para los primeros, blandir un arma es una forma de unirse a la Fuerza y proteger el orden. Para los Sith, ¿qué más da? Lo importante es que se cumpla su voluntad. A continuación, presentamos un ránking con los mejores sables láser ordenados de peor a mejor.
10. KI-ADI-MUNDI
Este miembro del Consejo Jedi posee probablemente el sable más sobrio y minimalista de la galaxia. Una arquitectura tan simple le permitió vivir lo suficiente como para convertirse en un sabio y longevo Jedi, pero no tanto como para sobrevivir a la Orden 66.
9. DARTH VADER
El sable de este Lord Sith es un clásico. Negro, con un mango algo aparatoso y diseñado para el mal. No en vano es uno de los símbolos más icónicos de la saga y, si a alguien no le convence, siempre le podrás cortar una mano con él.
8. GENERAL GRIEVOUS
Quizá ninguno de los sables que blande este militar sea excepcional, pero hay algo indiscutible: tiene un montón. Eso no garantizó su supervivencia ante un bláster, de acuerdo, pero le permitía atacar en remolino. Si tenemos en cuenta que este general pasó sus últimos días convertido en un pedazo de chatarra, nadie tiene derecho a ser demasiado duro con él.
7. KYLO REN
Este sable es simple, tosco y artesanal. Parece inapropiado para un siervo del Lado Oscuro, pero un Caballero Ren puede renunciar a las florituras de los Sith. Con un estilo marcadamente medieval, la hoja en forma cruz recupera la crudeza de la Trilogía original dejando algo de lado las coreografías de las precuelas que no agradaron a todo el mundo.
6. YODA
Cuando Yoda desenfundó su espada, los espectadores de El ataque de los clones estallaron en una sonora carcajada. Veinte segundos después eran presa del asombro. El diminuto sable del maestro Joda le permite desplazarse con agilidad e introducirse por los huecos que abren sus adversarios. Le viene como anillo al dedo, pequeño pero matón.
5. ASAJJ VENTRESS
Esta Jedi oscura que aparecía en Las Guerras Clon portaba dos espadas gemelas. Podía llevar una en cada mano o unirlas para construir un sable doble. Su mango curvilíneo dificultaba su uso, pero el dominio de la espada de Ventress consiguió superar esa dificultad. Lamentablemente, los Sith la consideraron una pieza prescindible y su historia fue muy corta.
4. EL CONDE DOOKU
Si hay una palabra que defina al sable del Conde Dooku es una: elegancia. ¿Cómo es posible que un anciano de 80 años siga siendo el mejor esgrimista de la galaxia? Muy sencillo, con aerodinamismo, curvatura y sobriedad de líneas. Christopher Lee le añadió a este personaje todo el porte que los Caballeros Jedi solo llevan en el título. Además, si te despistas, te fríe a rayos.
3. DARTH MAUL
Con aquella música dramática, los pinchos de su cabeza y su cara roja, Darth Maul parecía el mismísimo diablo. Pero lo que más miedo daba de él era su terrorífico estilo de lucha. Ni siquiera en la Trilogía original se había visto un dominio del sable como ese. El sable de doble hoja de Darth Maul, aparte de escalofriante, es un arma que en las manos adecuadas permite despachar a dos Jedis al mismo tiempo. Y si se rompe, te queda uno normal.
2. EL GRAN INQUISIDOR
Este personaje casi desconocido de la serie Rebels porta una de las armas más espectaculares de todo el universo Star Wars. Su empuñadura, muy similar a la del Conde Dooku, destila la elegancia de un mosquetero. Sin embargo, se puede desdoblar como el doble filo de Darth Maul y girar sobre sí misma como un helicóptero para hacer trizas todo lo que le rodea. Es una pena que un prototipo así no llegara a tiempo a la gran pantalla.
1. MACE WINDU
Normalmente, son los siths quienes poseen los sables más extravagantes. Sin embargo, Mace Windu les dio a probar de su propia medicina. Tras insistirle mucho a Lucas, Samuel L. Jackson consiguió que el director le construyera un sable morado para poder encontrarse cuando viera en el cine las batallas multitudinarias de las precuelas. ¡Ese es el verdadero camino del Jedi!
BONUS TRACK: EL SABLE LÁSER DE LOS SKYWALKER
Se trata sin duda de la reliquia (junto con el caso de Darth Vader) más preciada de la saga. El sable láser que portó Anakin Skywalker hasta ser derrotado por Obi-Wan Kenobi y que años después el ya viejo jedi le entrega a su hijo, Luke Skywalker, en Tatooine. Un arma que vuelve a historia en El despertar de la Fuerza cuando Rey se topa con él en el sótano de Maz Kanata... con evocadoras consecuencias.