MADRID, 23 Oct. (CulturaOcio) -
Quedan menos de dos meses para que Rogue One, la nueva película de Star Wars y primer spin-off cinematográfico de la saga, llegue a los cines. Pero, aunque la cita despierte mucha expectación, es evidente que los fans no pueden dejar de pensar en lo visto en la última entrega de la franquicia, El despertar de la Fuerza, y siguen dándole vueltas a la escena más impactante del Episodio VII.
Ahora, con motivo del estreno del DVD y Blu-Ray de la película, su director, J.J. Abrams, ha arrojado algo de luz sobre la secuencia en cuestión que tuvo como protagonistas a Han Solo, encarnado de nuevo por Harrison Ford, y a Kylo Ren, el nuevo villano de la saga al que da vida Adam Driver.
((ATENCIÓN: ESTA NOTICIA CONTIENE SPOILERS))
El material extra de la edición en Blu-Ray de la película incluye una entrevista con J.J. Abrams en el que el director explica esa secuencia: el momento en el que Ben Solo (el verdadero nombre de Kylo Ren) atraviesa a su padre con un sable láser dentro de la Base Starkiller, el mortífero arma de la Primera Orden.
Y, sorprendentemente, el director reveló que Kylo no quería matar a su padre y que incluso las palabras de Han consiguieron hacerle recapacitar... pero en un momento dado pensó que era ya tarde para arrepentirse y eligió abrazar totalmente el mal. Una huída hacia adelante en la que dejó a su paso el cadáver de su padre.
"Lo cierto es que creo que en ese momento Kylo Ren estaba siendo convencido dejar todo aquello. Tal y como le dijo Han, Snoke lo estaba simplemente utilizando y creo que eso es algo que el propio Ben sabe bien. Pero no puede dar marcha atrás, ya ha ido demasiado lejos", afirma el director que, en todo caso, bromeó al decir que en Star Wars "cuando dos personajes se juntan en un puente increíblemente delgado a 16.000 kilómetros de altura y sin barandillas... no puede terminar bien".
Una clara referencia al enfrentamiento, también entre padre e hijo, que protagonizaron Darth Vader y Luke Skywalker en Star Wars: El Imperio contraataca, aunque en este caso el combate se saldó con la amputación de la mano del joven Skywalker... y no su vida.
