MADRID, 27 May. (CulturaOcio) -
Furiosa: de la saga Mad Max ha llegado a los cines como una precuela de Fury Road centrada en el inolvidable personaje que antaño interpretó Charlize Theron. Ahora, Anya Taylor-Joy asume el papel, recibiendo esos mismos halagos. Sin embargo, la película cuenta con una escena totalmente inverosímil.
((ATENCIÓN: ESTA NOTICIA CONTIENE SPOILERS))
Se trata del momento en el que al fin se aborda cómo Furiosa perdió su brazo, pues en Fury Road llevaba uno mecánico. Esto sucede en el último tercio del filme, cuando Furiosa y Praetorian Jack escapan del Criadero de Balas pero son capturados por Dementus y sus sanguinarios secuaces.
Durante la persecución, el brazo de Furiosa queda totalmente aplastado entre dos coches. Posteriormente, Dementus aprovecha ese dolor para colgarla del mismo brazo mientras le hace observar la tortura a Jack. Sin embargo, tras un buen rato, el villano descubre que la heroína se ha arrancado el brazo, ha inutilizado su camión y ha escapado robando una moto.
Esta escena queda como algo muy épico si se asume la suspensión de credibilidad que reclama la película. Pero en realidad es un enorme agujero de guion que empaña el buen hacer de George Miller en Furiosa. Y es que es una secuencia totalmente irreal.
Para empezar, Furiosa está atada e indefensa de su brazo destrozado. Y no se explica cómo es capaz de arrancárselo. Pero, sobre todo, parece imposible que nadie se diera cuenta. La protagonista está apresada en el camión de Dementus, totalmente rodeado por las motos de sus secuaces, que dan vueltas en círculos sin parar mientras arrastran a Jack hasta la muerte.
Se podría incluso asumir que, debido al polvo levantado por las motos y el ruido de los motores, nadie ve ni escucha a Furiosa cortándose el brazo e inutilizando el camión. Pero donde no hay salvación posible es en el momento en el que roba una moto y huye del lugar sin ser vista. La heroína sale de ese círculo de la muerte sin que nadie se dé cuenta hasta que Dementus decide ir a ver cómo está su prisionera.
Este agujero de guion, aunque queda reducido a anécdota en el conjunto de la película, puede provocar que muchos espectadores se salgan por completo del relato por tratarse de algo imposible de creer o defender. Descubrir cómo Furiosa perdía su brazo era uno de los momentos más esperados y, por desgracia, no ha tenido el buen desarrollo que se esperaba.