MADRID, 20 May. (CulturaOcio) -
Ryan Reynolds crea amigos y enemigos allí por donde va con su interpretación de Deadpool, el mutante gamberro que ha vuelto a la gran pantalla en Deadpool 2. Pues bien, el último dardo envenenado hacia el actor canadiense, y por tanto a Deadpool, está protagonizado por Warner Bros., que le pidió el anillo de Linterna Verde debido a sus constantes bromas en la segunda cinta del mutante.
Todo comenzó cuando la propia Warner Bros. le comunicó irónicamente en Twitter al intérprete que "vamos a necesitar el anillo de nuevo". Con estas palabras, la productora aprovechó para darle un toque de atención a Reynolds por las menciones al superhéroe de traje verde en Deadpool cuando este asegura que no quiere un traje verde. Mención a parte, las mofas correspondientes de Deadpool 2, la principal causa del reclamo.
Lejos de guardar silencio, el actor respondió al recadito asegurando que si se hubiera utilizado desde un principio un "anillo anti-conceptivo" no habría ocurrido nada. Ante estas demoledoras palabras, muy propias de Deadpool, Warner Bros. no quiso seguir en la refriega y no contestó.
Parece que ambas partes todavía tienen una espina clavada por el rotundo fracaso de Linterna Verde, sobre el que seguro que Reynolds hará más de un chiste en el futuro. Pese al desastre de aquel film, en el que muchos de los personajes animados no tenían voz a falta de escasos meses del estreno, Reynolds conoció a Blake Lively, su esposa y madre de sus dos hijos.
Para conocer más comentarios sobre este curioso enfrentamiento solo hace falta ver Deadpool 2, cinta dirigida por David Leitch, y recién estrenada que está protagonizada por Ryan Reynolds (Deadpool), Josh Brolin (Cable), Morena Baccarin (Vanessa), Karan Soni (Dopinder), T.J. Miller (Weasel), Julian Dennison (Russell) y Leslie Uggams (Al).