MADRID, 24 Jun. (CulturaOcio) -
Han pasado 13 años desde que el padre de Britney Spears, Jamie Spears, recibiera la tutela de la cantante. Tras diversos problemas profesionales y adicciones, la artista experimentó un deterioro en su salud mental, lo que llevó a que perdiera el control legal de la mayoría de los aspectos de su vida, incluidas sus finanzas, en favor de su padre en 2008. Ahora, la intérprete ha acudido de nuevo a los tribunales para tratar de terminar con esta custodia.
Spears compareció ante el tribunal de Los Ángeles por vía telemática el miércoles 23 de junio y declaró ante la jueza Brenda Penny. "Después de haberle dicho al mundo entero que estoy bien, es una mentira. No estoy feliz, no puedo dormir, estoy deprimida, lloro todos los días. Es mi deseo y sueño que todo esto termine. Quiero recuperar mi vida", declaró la diva, que llegó a decir que su padre "debería estar en prisión".
"Realmente creo que esta tutela es abusiva. Quiero terminar con esta tutela sin ser evaluada. Quiero presentar una petición para poner fin a la tutela", reclamó la estrella, que aseguró que este control por parte de su padre le hacía "más mal que bien".
Entre otros sorprendentes detalles, Spears alegó que le gustaría volver a casarse y tener otro hijo, pero que no puede debido a que no le permiten retirarse el DIU que tiene implantado. "Mis tutores no me dejan quitármelo", expuso.
La artista llegó a decir que su padre "amaba tener el control que tenía sobre alguien tan poderoso como yo". "Solo quiero mi dinero y que todo esto termine", sentenció Spears, que comparó su situación con la de las víctimas de trata. "En California lo único similar a esto se llama tráfico sexual, hacer que alguien trabaje en contra de su voluntad, quitándole todas sus posesiones, tarjeta de crédito, dinero, teléfono, pasaporte", esgrimió.
VIGILANCIA CONSTANTE
La estadounidense también relató que es vigilada constantemente, incluso cuando se cambiaba de ropa o visitaba a sus hijos. Además, confesó que es obligada a tomar medicación o a actuar cuando no quería. "Quiero sentirme escuchada y os estoy contando esto de nuevo para que podáis entender la profundidad, el grado y el daño que me hicieron", aseguró.
El padre de Spears ha respondido al alegato de la artista a través de sus abogados, que han afirmado que Jamie "siente que su hija esté sufriendo y experimentando tanto dolor". "El señor Spears quiere a su hija y la echa mucho de menos", apuntaron sus representantes legales.
La jueza determinó que Britney Spears tendrá que presentar una petición oficial para acabar con la tutela y que será necesario programar otra audiencia en la corte. La celebridad tendrá que probar que es competente para tomar sus propias decisiones y recuperar su vida.