MADRID, 19 May. (CulturaOcio) -
- ¿Por qué es perfecto que suene Pearl Jam al final de 'The last dance' de Michael Jordan?
La docuserie sobre los Chicago Bulls de Michael Jordan termina con 'Present tense' de Pearl Jam sonando mientras asistimos literalmente a 'El último baile' de uno de los mejores equipos de baloncesto de la historia.
Y es que la relación de Eddie Vedder con los equipos de Chicago siempre ha sido muy estrecha, manteniendo por ello amistades con algunos de sus jugadores. Como por ejemplo Dennis Rodman, integrante de los Bulls victoriosos desde 1995 hasta 1998.
A ambos se les ha visto juntos bastantes veces en el Wrigley Field viendo un partido de béisbol de los Chicago Cubs, e incluso en una ocasión Rodman apareció en escena en un recital de Pearl Jam para levantar con sus brazos a Vedder durante una canción.
Con motivo del éxito de la serie sobre Jordan y sus Bulls, Vedder ha hablado de su relación con Rodman en The Bill Simons Podcast, de The Ringer: "Este tío trabajaba muy duro. Estaba todo eso del vestido de boda y todas las cosas que podría hacer, pero trabajaba duro".
Vedder desvela que Rodman y él comparten afición por la lectura, aunque el exbaloncestista siempre podía sorprender con ideas bastante más alocadas. Como por ejemplo, coger un avión privado para volar desde Seattle hasta Las Vegas después de un entrenamiento con los Bulls, el día previo a un importante partido frente los Seattle Supersonics.
Según el rockero, Rodman se le acercó tras el entrenamiento y le dijo que se iban a Las Vegas: "Yo dijé, '¿qué mierda es esta? Pensé que íbamos a subir (a la habitación del hotel a descansar). Compré un libro'".
La respuesta del deportista no dejaba mucho margen, pues lo tenía clarísimo: "Jane's Addiction tocan en Las Vegas". Y entonces Vedder vuelve a recodar sus palabras: "Yo estaba en plan 'Jesucristo, son las seis'. Y él en plan 'llegaremos sobre las nueve y no tocan hasta las nueve y media'".
Aunque Vedder asegura que al por entonces entrenador de los Bulls, Phil Jackson, le gustaba su amistad porque mantenía centrado a Rodman, el jugador decidió que esa iba a ser una noche bien diferente.
"Terminamos corriendo por el jodido aeropuerto de Seattle. La gente empezó a montar una carrera detrás de él, como si fueran su río, gritando '¡Dennis! ¡Dennis!'. Él se giró a la multitud señalándome y gritando 'Eddie Vedder está aquí'", relata el músico.
Su frenético plan terminó con los dos viendo el concierto de Jane's Addiction desde un lateral del escenario tomando unas cervezas. "Dennis me miró y me dijo 'es relajante, ¿verdad?'", termina Vedder riéndose al recordar la pequeña gran locura que compartieron juntos.