MADRID, 16 Abr. (CulturaOcio) -
En pleno debate sobre cuando intentar regresar a la normalidad, el gobernador de California, Gavin Newson, ha dibujado un escenario de lo más desalentador para la industria de la música en vivo al asegurar que no habrá conciertos en su estado hasta que haya una vacuna contra el coronavirus.
Durante una rueda de prensa, Newson ha explicado que no hay un calendario específico para levantar el confinamiento y las restricciones, pero que las grandes reuniones de personas y los conciertos serán lo último en recuperar la normalidad.
"La posibilidad de reuniones masivas es insignificante, en el mejor de los casos, hasta que lleguemos a la inmunidad colectiva y lleguemos a una una vacuna", ha remarcado, para luego plantear que por ahora no piensan en "eventos a gran escala que traen a cientos, miles, decenas de miles de extraños, todos juntos con todas las diferencias imaginables".
Ha aclarado, eso sí, que las condiciones pueden cambiar "radicalmente", aunque ha insistido en que es "improbable" que haya grandes eventos durante el verano en California (algo ya acordado por ejemplo en países europeos como Bélgica, donde se han prohibido las reuniones con muchas personas hasta el 31 de agosto, lo cual ya ha llevado a la cancelación de sus grandes festivales veraniegos).
LOS ÁNGELES
En esta misma línea ha hablado también el alcalde de Los Ángeles (California), Eric Garcetti, quien está considerando la posibilidad de prohibir grandes reuniones de gente -incluyendo conciertos, claro- hasta 2021 para tratar así de frenar la pandemia del coronavirus.
Según Los Angeles Times, Garcetti planteó esta posibilidad en su última reunión de alto nivel para afrontar las próximas medidas. El propio alcalde se expresó en estos términos después en declaraciones a la CNN, donde dijo que "será muy difícil ver" reuniones de mucha gente en eventos deportivos o conciertos en la ciudad antes de 2021.
California en general y Los Ángeles en particular son lugares con una gran actividad cultural, pero ahora la prioridad es la contención de la pandemia. Su festival más emblemático, Coachella, estaba previsto para este mes pero se ha aplazado hasta octubre, sin que esté muy claro ahora si se podrá celebrar para entonces.
Estos planteamientos llegan después de que en un debate organizado por The New York Times un experto apuntara al otoño de 2021 como el momento en el que se podrá recobrar cierta normalidad en lo que a grandes conciertos y festivales se refiere.