MADRID, 15 Abr. (CulturaOcio) -
La Comisión Europea ha destacado este miércoles que la realización de pruebas de Covid-19 a "gran escala" es una "condición previa fundamental para "detectar y frenar la pandemia" y para levantar las restricciones con el objetivo de volver "gradualmente" a la "forma de vida habitual".
Así lo asegura el Ejecutivo comunitario en el documento de orientaciones que ha publicado como parte de la 'hoja de ruta europea' (AQUÍ en pdf) hacia la eliminación de las medidas de confinamiento.
La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, y el presidente del Consejo europeo, Charles Michel, han abogado por una salida "coordinada" y "gradual" de las medidas de confinamiento impuestas para frenar el coronavirus, si bien han asumido que no podrá ser "idéntica" entre Estados miembros en donde la pandemia ha impacto con distintos tiempos y virulencia.
"No es una señal de que el confinamiento pueda levantarse ya, sino de que queremos ofrecer un marco para las decisiones de los estados miembro", ha subrayado Von der Leyen en una rueda de prensa en Bruselas, para dejar claro que su propuesta no va en contra de las restricciones que imponen aún la mayoría de países de la UE.
Michel, por su parte, ha añadido que estas recomendaciones se basan tanto en el "sentido común" como en los dictámenes científicos y que el objetivo es permitir a los países de la UE preparar de manera "progresiva, no de manera idéntica, pero sí similar", sus estrategias de salida de esta crisis.
El documento adoptado por el Ejecutivo comunitario advierte de que, antes de relajar la situación actual, deberán estar seguros de que sus respectivos sistemas sanitarios tienen la capacidad suficiente para absorber el previsible aumento de casos cuando se empiecen a levantar las medidas restrictivas.
Las recomendaciones de Bruselas abogan asimismo por una salida en varias fases, distanciadas en el tiempo, para que las autoridades puedan reaccionar si se disparan los contagios de nuevo. Por ello pide que se inicien a escala "local" y se amplíen geográficamente más tarde.
En el punto séptimo del apartado de recomendaciones de esta 'hoja de ruta' se detallan dichas fases concretamente para las reuniones de personas, que debieran ser "progresivas" y empezar por colegios y universidades, con medidas específicas como diferentes horarios de almuerzos, mejorar la limpieza, grupos más pequeños o más educación a distancia.
Se podría abrir después la actividad comercial minorista en tiendas (empezando también por las más pequeñas), luego restaurantes y bares (también con restricciones de horarios y aforos) y por último las reuniones masivas que son, concretamente según este documento, "festivales, conciertos, etc".
Aunque el apartado mencionado se titula Recomendaciones, esto vendría a confirmar los temores de la industria de la música en vivo, que reiteradamente está alertando de su situación precaria al estar totalmente paralizada. Y hay que tener en cuenta, a tenor de esta hoja de ruta, que lo último que recuperaría su actividad serían los macrofestivales y los macroconciertos.
Esto ha llevado a varios expertos a apuntar al otoño de 2021 como el momento en el que la industria de la música en vivo podría volver a organizar grandes eventos. Siempre teniendo en cuenta la situación de cada país pues, mientras las salas de conciertos permanecen cerradas en multitud de países, en Suecia, donde el coronavirus ha tenido una menor incidencia, ya hay una pequeña sala programando conciertos con aforo reducido y medidas de distanciamiento social.