MADRID, 8 Feb. (CulturaOcio) -
Los Broncos de Denver se impusieron esta pasada madrugada a los Carolina Panthers en la final de la Super Bowl 50, uno de los eventos televisivos con mayor audiencia del año, que se estima ha sido seguido por más de cien millones de personas en directo.
Pero más allá del resultado deportivo, de nuevo las actuaciones musicales para amenizar la velada han tenido también un peso específico propio, con los 13 minutos de actuación de Coldplay durante el intermedio (la velada la abrió Lady Gaga cantando el himno de Estados Unidos).
La banda británico ejecutó un popurrí de varios de sus éxitos, comenzando con la grandilocuencia de Viva la vida, para encadenar después temas de diversas épocas como Paradise y Adventures of a lifetime, antes de que apareciera en escena la urgencia bailable de Bruno Mars.
Fue un cambio de tercio que propició un momento estelar con la interpretación del gran éxito Uptown funk, con una coreografía frenética. Y en ese punto, otro subidón con Beyoncé derrochando presencia escénica para presentar su nuevo single, Formation, estrenado unas horas antes de la Super Bowl.
Acto seguido, duelo de caderazos entre Beyoncé y Bruno Mars de nuevo al ritmo de Uptown funk con el Levi's Stadium de Santa Clara (California) convertido en una enorme discoteca repleta de aullidos de jolgorio.
En el tramo final, de nuevo la épica de Coldplay para encadenar Clocks, Fix you (con snippet de Beautiful day de U2) y Up&Up. Decenas de personas en el escenario con Coldplay, Beyoncé y Bruno Mars convirtiendo la actuación en una especie de gran salmo en un emotivo coro colectivo.
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