MADRID, 25 Jun. (CulturaOcio) -
Agentes de SHIELD lanzó el pasado 27 de mayo su séptima y última temporada. La serie de ABC se ha despedido con un sorprendente cambio de línea temporal, un detalle que podría afectar al futuro del Universo Cinematográfico Marvel.
Una raza alienígena conocida como Chronicoms está intentando reescribir el pasado para asegurarse de que puedan conquistar la Tierra en el presente. Por su parte, el equipo de SHIELD se ha embarcado en un viaje en el tiempo para evitar que los Chronicoms consigan su objetivo.
El episodio 5 de la última temporada muestra a los protagonistas llegar a 1973. Allí descubren que Hydra está trabajando en Project Insight, un satélite cuyo trabajo es rastrear toda amenaza para su propia conquista de la Tierra. Este fue el proyecto que apareció anteriormente en Capitán América: Soldado de invierno, ambientada en 2014.
El calendario de Hydra parece haber avanzado 50 años gracias a los Chronicoms, lo que significa que Capitán América no está para detenerlos esta vez. La versión de los años 70 de Project Insight se basa en El Faro, una instalación cuya existencia había sido borrada misteriosamente de los registros de SHIELD en la temporada 5. Por lo tanto, podría ser que el Proyecto Insight original de los 70 simplemente estuviera oculto.
El capítulo sin embargo confirma que la línea temporal del Universo Marvel ha cambiado de manera decisiva. El problema central es Wilfred Malick, quien todavía está vivo y trabaja con su hijo Nathaniel como figuras importantes en Hydra. Tal como confirmó la temporada 3, Wilfred Malick debería haber muerto en 1970; poco después, Nathaniel fue transportado al planeta Maveth y su muerte fue planeada por su hermano Gideon Malick.
Tanto Wilfred como Nathaniel están vivos en esta trama en 1973, asi como en 1976, aclarando que los Chronicoms han creado una nueva línea temporal.
Es posible que los Chronicoms hayan creado una línea temporal ramificada, es decir, una realidad alternativa dando paso al Multiverso, pero en la temporada 7 Simmons insinúa que solo hay una línea temporal, un futuro que podría reescribirse alterando el pasado.
