MADRID, 21 Abr. (CulturaOcio) -
Estrenada el pasado 15 de abril, 'Anatomía de un escándalo' se ha convertido en uno de los últimos éxitos en Netflix. La serie desarrollada por David E. Kelley y Melissa James Gibson y que protagonizan Sienna Miller, Rupert Friend, Michelle Dockery y Naomi Scott aborda un tema de triste actualidad, el acoso y el abuso sexual en el ámbito político. La buena recepción del público sobre la ficción ha hecho preguntarse si está basada o en hechos reales.
La respuesta es que no exactamente, aunque sí existe una base real detrás. 'Anatomía de un escándalo' adapta la novela homónima de la autora Sarah Vaughan, quien antes de ser escritora trabajó como corresponsal política y fue redactora de The Guardian. La miniserie narra el juicio al parlamentario conservador británico James Whitehouse (Friend), quien ha sido acusado de violación por una investigadora de su equipo, Olivia Lytton (Scott).
Aunque la serie sea una adaptación televisiva de una novela, es importante recalcar que tanto la ficción como el libro tienen como referencia casos reales. Es más, el escrito de Vaughn salió publicado en 2018 y fue una respuesta directa a una serie de acusaciones de conducta sexual inapropiada que hubo contra miembros del Parlamento británico, una de las consecuencias de la ola del movimiento Me Too, iniciado en 2017.
Más de 50 miembros del parlamento británico fueron acusados de abuso o acoso sexual, aunque solamente un puñado de ellos fueron condenados. El Plan Independiente de Quejas registró alrededor de 70 denuncias. Aunque la historia de 'Anatomía de un escándalo' es completamente ficticia, sobrecoge el hecho de que haya surgido inspirado en todos estos sucesos reales.