MADRID, 16 Sep. (CulturaOcio) -
El cuarto episodio de El Señor de los Anillos: Los Anillos de Poder ha desvelado el gran misterio que había planteado el anterior capítulo. Un siniestro personaje llamado Adar lideraba un ejército de orcos en Southland, pero poco más se sabía de él, a quien ni siquiera se le había visto el rostro. Ahora, en la reciente emisión, se ha desvelado al fin su naturaleza, levantando dos teorías sobre su posible identidad real y otra sobre su destino en la serie.
((ATENCIÓN: ESTA NOTICIA CONTIENE SPOILERS))
Durante el capítulo, se descubre que Adar no es un hombre ni un orco, sino un elfo oscuro. En la mitología de J.R.R. Tolkien no es muy habitual ver a seres de esta raza sucumbir ante la oscuridad, pero Adar sería uno de ellos. Superviviente de la Guerra de la Cólera, el villano se habría pasado durante o después del conflicto al bando de Morgoth y Sauron.
Sin embargo, pese a que en un primer momento Adar podría parecer un personaje nuevo creado para la serie, hay ciertas pistas que señalan a que en realidad podría ser la nueva identidad de alguien ya del que ya escribió Tolkien en su Legendarium. En el libro se mencionan a dos elfos que también se alistaron en las filas del mal y sirvieron a Sauron, por lo que Adar podría ser uno de ellos.
¿QUIÉN ES ADAR?
La primera opción, pero la menos probable es que se trate de El, un elfo de la Primera Edad que provenía de Beleriand, lugar que en su conversación con Arondir, el elfo silvano apresado por los orcos, Adar afirma conocer. El fue un herrero que desarrolló nuevos métodos de metalurgia, logrando una nueva aleación negra llamada galvorn. En Los Anillos de Poder, en un momento dado Adar sacrifica a un orco herido precisamente con una hoja de metal negra que podría estar hecha de dicha aleación.
El fue una persona horrible y acabó por asesinar a su esposa cuando esta huyó de él. Por el crimen fue condenado a muerte y lanzado al acantilado de Caragdr. Justo antes de morir, el elfo oscuro lanzó una maldición sobre su hijo, Maeglin.
Y es en este punto en el que aparece la segunda posibilidad, ya que es más probable que sea él, el propio Maeglin, quien se esconda bajo el seudónimo de Adar. Y es que, además del supuesto destino de El, el descarte también podría confirmarse por el hecho de que él pasó en innumerables ocasiones por el río en Bereland, mientras que Adar afirma haberlo hecho "una vez".
Maeglin, al igual que su padre, fue un elfo cruel y despiadado. Criado por su tío en la ciudad de Gondolin, se enamoró de su prima, algo prohibido entre los elfos que, a pesar de sus ribicundas cabelleras, tenían unas costumbres muy distantes a las de, por ejemplo, los Targaryen de Juego de tronos y La Casa del Dragón.
Por ello comenzó a desarrollar resentimiento e ira hacia sus semejantes. Finalmente, acabó por traicionarlos y se unió a Morgoth, que le prometió reinar sobre el lugar y el amor de su deseada familiar. Pero Gondolin fue destruido y Maeglin fue derrotado y arrojado, como su progenitor, por un acantilado, golpeándose repetidamente con las rocas y desvaneciéndose en las llamas. Aunque el el mundo de Tokien ese final podría no significar su muerte.
RELACIÓN ENTRE ADAR Y SAURON
Adar tiene cicatrices de quemaduras en su cuerpo, algo que cuadra con la teoría de ser Maeglin. El elfo pudo haber sobrevivido, adoptando el nuevo alias y esperando su momento para volver a servir al Señor Oscuro, esta vez a Sauron. Pero, ¿cómo lo hará? Por el momento se desconoce si sencillamente está utilizando su ejército de orcos para conquistar territorios en su nombre o si se puede esperar algo más.
En el cuarto episodio de Los Anillos de Poder, Adar mantiene una conversación con Arondir, a quien deja huir para que avise a los humanos supervivientes de las Tierras del Sur de que se unan a él si no quieren perecer. Arondir le pregunta por qué los orcos le llaman "Padre", ante lo que Adar le responde: "Te han contado muchas mentiras. Algunas están tan arraigadas que hasta las piedras y las raíces las creen. Desenmarañar todo eso requeriría prácticamente la creación de un mundo nuevo".
Es entonces cuando Adar sugiere algo que lo relaciona con Sauron. Es cierto que podría ser simplemente un fiel seguidor, un lugarteniente de las fuerzas del mal que asolan la Tierra Media. Pero, según sus palabras, la creación de ese mundo nuevo "es algo de lo que solo los dioses son capaces, y yo no soy un Dios. Al menos... aún no".
Si Adar espera conseguir los poderes de un dios, esto podría suponer que en realidad su cuerpo es el elegido por Sauron para reencarnarse en el momento adecuado en el que decida volver a ser corpóreo. Las palabras de Adar podrían entonces haber desvelado uno de los grandes misterios de Los Anillos de Poder ya que él sería el recipiente para que el Señor Oscuro regrese para, una vez más, intentar sumergir al mundo en las eternas tinieblas. En cualquier caso, este no se resolverá hasta los siguientes episodios.
