MADRID, 14 Oct. (CulturaOcio) -
El Señor de los Anillos: Los Anillos de Poder ha puesto punto y final a su primera temporada. Ocho capítulos en los que la serie de Amazon Prime Video, la más cara de la historia, ha planteado numerosos interrogantes. Algunos de ellos ya se resolvieron, pero otros, como la verdadera identidad del Extraño y, sobre todo, de Sauron, han encontrado al fin respuesta.
((ATENCIÓN: ESTA NOTICIA CONTIENE SPOILERS))
El octavo capítulo de la serie basada en los libros de Tolkien llegaba con la promesa no solo de dejar encarrilada la segunda temporada, sino de resolver ambas cuestiones. Y lo ha hecho... en uno de los casos definitivamente aunque en otro solo en parte. El Extraño se había pasado toda la temporada migrando con los pelosos, mientras que Sauron se encontraba en paradero desconocido. De hecho, incluso el temible Adar, el elfo oscuro que comanda los orcos asentados ahora en el recién creado Mordor, aseguraba haberlo matado tiempo atrás. Ahora, por fin, se ha desvelado quiénes son.
UN MAGO NUNCA LLEGA TARDE
En el caso del Extraño, su sola presencia ya suscitaba un gran interés. Caído desde las estrellas en el primer episodio, a lo largo esta primera temporada de Los Anillos de Poder el hombre del meteorito había mostrado su inmenso poder. Daba vida a árboles calcinados, controlaba los elementos y buscaba su hogar en una constelación desaparecida. Por ello, un siniestro grupo de tres adoradoras le andaba buscando.
Así, una vez que se encuentran, los singulares personajes ataviados con túnicas blancas desvelan sus verdaderas intenciones: "Hemos venido a serviros, señor Sauron". El Extraño, atónito, no comprende lo que ocurre, pero ellas se ganan su confianza al explicarle que conocen la constelación que busca, la Capucha del Ermitaño, visible únicamente desde las lejanas tierras de Rhn. Es allí donde quieren llevarle.
Sin embargo, Nori y otros pelosos hacen acto de presencia para ayudar a su larguirucho amigo. Comienza una batalla entre los pequeños seres de pies grandes y las tres aterradoras adoradoras de Sauron. Es entonces cuando el Extraño se ve obligado a tomar partido. Recordando su amistad con Nori, decide defender a los pelosos. "De la sombra vinisteis. ¡A la sombra vais a regresar!", les grita.
"No es Sauron", dice una. "Es el otro, el istar. Este es...", añade otra. "Soy bueno", contesta el Extraño, que acaba con ellas con una nueva demostración de su magia. Su identidad ha quedado revelada. Los istari son lo que se conoce como sabios o magos. Se trata de un tipo de maiar, seres espirituales de gran poder pero inferiores a los valar, que fueron enviados por estos últimos a la Tierra Media para ayudar a sus tribus y civilizaciones en la batalla contra el Señor Oscuro.
El Extraño es un istar o mago, pero son varios los seres de esa naturaleza que aparecen en los mundos de Tolkien. La serie no quiere confirmar su identidad con palabras, dejando una pequeña duda sobre cuál de todos es. Sin embargo, atenor de las frases que utiliza en sus conversaciones con Nori cuando va recuperando la memoria, parece bastante evidente que el Extraño es el mismísimo Gandalf. Además de ser el istar más conocido, y estar caracterizado con una apariencia similar aunque más joven que la de la trilogía de Peter Jackson, el episodio también incluye una referencia a las películas que confirmarían la teoría.
Al final del episodio, Nori y el Extraño están listos para emprender su viaje hacia las tierras de Rhn. No saben exactamente hacia dónde ir, y el Extraño sugiere entonces un método que les será familiar a los fans de la franquicia: "Cuando dudes, Elanor Brandipié, sigue siempre tu olfato". Exactamente la misma frase que Gandalf le dice al hobbit Meriadoc Brandigamo en La comunidad del anillo.
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Lo único que niega la evidencia es que, en los libros, Tolkien escribió que Gandalf no llegó a la Tierra Media hasta la Tercera Edad, mientras que la serie se ambienta en la Segunda. Esto podría significar o bien que el proyecto de Amazon ha vuelto a cambiar ligeramente el canon temporal, o bien que el Extraño no es Gandalf sino algún otro mago aliado de las fuerzas del bien. Cronológicamente, lo que más encajaría sería que se tratara de Alatar, el primero de los magos azules que llegó a la Tierra Media.
SAURON SIEMPRE ESTUVO AHÍ
El segundo gran interrogante de Los Anillos de Poder, y también el principal, era la identidad o localización de Sauron. El Señor Oscuro no se había dejado ver en toda la temporada, aunque muchos fans habían sugerido teorías que, cada vez más, apuntaban en la misma dirección. Descartado el Extraño por su comportamiento bondadoso y descartado Adar por su odio irrefrenable contra Sauron por maltratar a los orcos, el foco apuntaba directamente a un nombre: Halbrand.
Dichas teorías, una vez más, han acertado de lleno. Herido en la batalla entre los hombres de Númenor y las fuerzas orcas de Adar, Halbrand llega acompañado de Galadriel hasta Lindon, tierra élfica donde se encuentra la forja de Celebrimbor. Tras curarse de sus heridas gracias al poder de la medicina élfica, pronto comienza a ayudar al herrero en la búsqueda de una solución para trabajar con el mithril, mineral que presuntamente salvará a los elfos de la oscuridad que los acecha. Hablrand trabaja sin descanso hasta dar con la clave, realzar un objeto circular y de un tamaño no muy grande. Tras hablar de cetros, espadas y coronas, finalmente se decantan por, efectivamente y sí, anillos.
Pero, entre tanto, Galadriel, que ya había comenzado a sospechar de Haldbrand en cuanto llegaron a Lindon, se da cuenta de su error por unas palabras que Celebrimbor le dirige al rey Gil'galad. Primero, el herrero confirma que las sugerencias de Halbrand han sido clave para llevar a cabo la tarea y después pronuncia lo siguiente: "Estamos a punto de fraguar una nueva clase de poder. No de fuerza, sino de espíritu. No a partir de la carne sino sobre la carne". Esto es precisamente, palabra por palabra, lo que Adar le dijo a Galadriel que era el objetivo de Sauron.
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La elfa se pone entonces a investigar sobre las Tierras del Sur y el linaje real, del que Halbrand afirma ser el último descendiente. Lo que encuentra es que aquellas tierras, ahora convertidas en Mordor, quedaron sin rey hace mucho tiempo. Todas las piezas encajan. Y por ello Galadriel hace frente a Halbrand, ya desenmascarado como Sauron. Este le provoca un profundo sueño en el que le pide aliarse con ella, manipulándola a través de visiones sobre su vida pasada para explicarle que lo que busca es sanar la Tierra Media, no destruirla.
"Te conté la verdad. Te dije que había hecho el mal y no te importó porque sabías que nuestro pasado no significaba nada en comparación con nuestro futuro", le argumenta. Galadriel no está convencida, pero él insiste: "Juntos podemos salvar esta Tierra Media". Ella le contesta "¿Salvar? ¿O gobernar?", ante lo que Halbrand sugiere: "No veo la diferencia". Una vez más, la comandante rechaza la propuesta y como contestación recibe una amenaza. "¿Qué van a hacer cuando les cuentes que tú y yo éramos aliados? ¿Cuando les digas que Sauron está vivo gracias a ti?".
Sin embargo, Galadriel no se achanta y replica: "¡Vas a morir gracias a mí!". Gracias a esto despierta del embrujo, solo para comprobar que Halbrand ha huido. En un primer momento no se sabe hacia dónde se ha dirigido, pero finalmente se le ve entrando en Mordor, con la vista puesta en el volcán que estalló, el Monte del Destino. La conquista de estas tierras ahora gobernadas por su aparente rival como líder de las fuerzas oscuras Adar llegará, eso sí, en la segunda temporada de Los Anillos de Poder.
