MADRID, 23 Jul. (CulturaOcio) -
Gayle Rankin fue una de las incorporaciones al reparto de La Casa del Dragón para su segunda temporada y su personaje, Alys Ríos, es sin duda uno de los más misteriosos de la nueva tanda de capítulos. Aunque hasta ahora su papel haya sido discreto y limitado a Harrenhal, el sexto episodio de la ficción ha dejado claro que es una figura a la que tener muy en cuenta en la Danza de Dragones.
((ATENCIÓN: ESTA NOTICIA CONTIENE SPOILERS))
Desde que Daemon tomara Harrenhal, Alys ha sido un personaje recurrente en la trama del príncipe Targaryen. Ya en la primera noche de Daemon en la fortaleza, la mujer le dice que morirá allí, a modo de profética sentencia. A partir de entonces, muchas de las apariciones de Alys han tenido que ver con las alucinaciones que atormentan al esposo de Rhaenyra.
Si bien en Fuego y Sangre, la novela de George R.R. Martin en que se basa la ficción, no se describe una relación significativa entre Alys y Daemon, en la serie estos interactúan numerosas veces. De hecho, se da prácticamente por sentado que es Alys, conocida en la obra de Martin como la Reina Bruja, quien anda detrás del mal que aqueja a Daemon.
Así, la principal teoría es que las visiones que sufre el Targaryen estén provocadas por pociones elaboradas por Alys, más que por la supuesta maldición que pesa sobre la fortaleza. En cualquier caso, las intenciones de la misteriosa mujer no son nada claras ya que, si bien todo apunta a que podría estar maquinando contra Daemon, en la sexta entrega le aconseja sobre su difícil situación con respecto a las Tierras de los Ríos y este llega a pedirle ayuda.
Y es que Daemon ha comenzado a frustrarse. Su intención al conquistar Harrenhal era controlar las Tierras de los Ríos, un área estratégica para la guerra, debido a su central ubicación en Poniente, y reunir un ejército que luchara a favor de los Negros. No obstante, tras varios episodios lidiando con las rencillas y lealtades de las distintas casas, el Targaryen está lejos de conseguir la fuerza unificada que perseguía.
Alys señala la importancia de Lord Grover Tully, señor de Aguadulces en las Tierras de los Ríos. "Sin él, nunca levantarán sus estandartes como uno solo", remarca la mujer. Así pues, sin el apoyo de este, Daemon nunca conseguirá su objetivo. Cuando el Targaryen se percata de que no puede hacer nada al respecto, Alys le anuncia que "en tres días el viento cambiará".
ALYS RÍOS PROVOCÓ LA MUERTE DE LORD GROVER
No pasa mucho tiempo desde esta conversación hasta que Ser Simon Strong comunica a Daemon que Lord Grover ha fallecido. El señor de Aguasdulces se hallaba débil y enfermo desde hacía tiempo, pero un importante detalle en las palabras del castellano sugieren al espectador que la muerte no ha sido natural.
"Había estado enfermo, por supuesto. Los maestres de Aguasdulces han estado desesperados. Nuestra propia curandera, Alys Ríos, ofreció voluntariamente sus reputadas habilidades, pero no había nada más que hacer", dice Ser Simon. Ante esto, Daemon sonríe levemente, pues, tal y como le había anunciado Alys, los vientos parecen haber cambiado.
El capítulo sugiere así que ha sido la mujer quien ha provocado la muerte de Lord Grover, quizá haciendo uso de la hechicería. "Creo que es una especie de maestre, y una sanadora en muchos sentidos de la palabra. Tanto si las pociones de Alys son pociones como si no, ha mantenido a Harrenhal en pie durante generaciones, manteniendo a la gente con vida, o no", declaraba Rankin sobre su personaje en una entrevista concedida a Vulture, sugiriendo que Alys es más que capaz de matar con sus artes.
En todo caso, la muerte de Lord Grover Tully sin duda precipitará los acontecimientos en las Tierras de los Ríos. El nuevo señor de Aguasdulces, Oscar Tully, es un muchacho al que Daemon puede manejar y usar para unir a las casas. Por otro lado, puesto que el ejército de los Lannister prosigue su avance, es solo cuestión de tiempo que los Verdes y los Negros se vean de nuevo las caras en un enfrentamiento.