MADRID, 23 Ago. (CulturaOcio) -
El estreno de 'La Casa del Dragón' ha permitido ver a los dragones en todo su esplendor. Las bestias mitológicas abundan en esta precuela, ambientada 200 años antes de lo sucedido en 'Juego de Tronos'. La ficción desarrollada por Ryan Condal y Miguel Sapochnik ha vuelto a plantear una cuestión entre los fans que ya surgió en las últimas temporadas de la ficción original: ¿cómo y por qué los miembros de la familia Targaryen son los únicos en controlar a los dragones?
Estas bestias mitológicos se presentaron ante el fandom en 'Juego de tronos', cuando siglos después de su extición... Daenerys (Emilia Clarke) logró hacer eclosionar tres huevos de los que salieron Rhaegal, Viserion y Drogon, los tres 'hijos' de la Madre de los Dragones.
Al ser de la casa Targaryen, siempre dijo que la joven khaleesi tenía "sangre de dragón" fluyendo por sus venas y llegó incluso a amamantarlos, lo que sugiere que la conexión y el vínculo entre la familia Targaryen y las bestias aladas es tremendamente profunda. De hecho, Daenerys lloró profundamente la muerte de Rhaegal y Viserion y, cuando ella fue asesinada por Jon Snow (cuyo verdadero nombre era en realidad Aegon Targaryen) en el último capítulo, fue Drogón quien tomó el cuerpo de su madre y se fue volando con él lejos de Desembarco del Rey.
De parecida forma, el primer capítulo de 'La Casa del Dragón' ha mostrado ya que en aquella época, unos 200 años antes de 'Juego de Tronos' la conexión entre las letales y colosales criaturas y los Targaryen es muy importante. Así, la joven princesa Rhaenyra (Milly Alcock) aparece compartiendo un fuerte vínculo con su propio dragón, Syrax al igual que al final del episodio lo hace Daemon (Matt Smith) con el temible Caraxes, el dragón rojo.
Pero el episodio 1x01 también cuenta con un comentario por parte del rey Viserys que llama poderosamente la atención. Cuando habla con su hija para comunicarla que va a nombrarla oficialmente su heredera al Trono de Hierro, y antes de contarle la profecía del Sueño de Aegon, le avisa de que el poder para controlar los dragones es algo muy delicado que puede ser un arma de doble filo.
"La idea de que controlamos a los dragones... es un engaño. Su poder no está hecho para los hombres. Por eso cayó Valyria y si no aprendemos del pasado acabaremos igual. Un Targaryen ha de entenderlo para ser rey... o reina", le dice.
LA DOMA DE LOS DRAGONES EN VALYRIA
Pero más allá de que se trate de un poder hecho o no para los hombres la gran pregunta es... ¿cómo lograron controlarlos? Primero, hay recordar que los Targaryen no era la única familia que podía poseer y montar dragones. Es más, había varios clanes que podían hacerlo en Valyria, llegando a tener flotas enteras de estos reptiles alados. Es más, la familia Targaryen era una de las casas menores en lo referente a la nobleza del lugar. Sin embargo, fueron los únicos --junto con otras familias menores amigas como los Velaryon y los Celtigar-- que, gracias a un sueño premonitorio, lograron huir de la Maldición y se asentaron en Poniente, concretamente en la isla de Rocadragón.
La Maldición fue una misteriosa catástrofe que exterminó a todos los seres vivientes de Valyria, dragones incluidos, convirtiendo lo que fue un esplendoroso imperio en un angosto y siniestro páramo. El motivo de que los Targaryen sobreviviesen fue que Daenys, la hija de Aenar Targaryen, tuvo un extraño sueño en el que predecía la Maldición e instaba a su familia a huir del lugar, llevándose consigo a sus cinco dragones.
Son varias explicaciones posibles sobre cómo los Targaryen, y las casas de Valyria en general, pudieron tener un vínculo tan estrecho con estas criaturas que fueron descubiertas hace unos 5.000 años en la cadena de volcanes conocida como las Catorce Llamas y, a partir de entonces, se hicieron expertos en su cría y adiestramiento, lo que les llevó a construir un enorme imperio imponiendo el enorme poder destructor que les otorgaban estas máquinas de guerra aladas.
Dado que los habitantes del Feudo Franco de Valyria usaban a los dragones como armas, incluso como mero medio de transporte, se cree que los señores de estos animales mitológicos usaban hechizos y demás conjuros para someterlos a su voluntad. También se cree que otros pueblos usaron cuernos de dragón para domesticarlos.
También se ha sugerido que, para mantener ese nexo con los dragones, aquellos que pudieron domarlos decidieron casarse entre sí para mantener una consanguineidad que evitase que se perdiera ese extraño y en cierto modo mágico don. De ahí, que casi todos los Targaryen lucieran el tan característico cabello rubio plateado y tuviesen los ojos azules o de tonos violetas.
En todo caso, no es necesario llevar el apellido Targaryen para montar un dragón... pero sí parece serlo tener sangre Valyria. De hecho, entre los miembros de la familia Velaryon también hay algunos notables jinetes de dragón. En los libros de George R.R. Martin se dice, además, que una vez que el dragón y el jinete se han unido, ese dragón no permitirá que nadie más lo monte mientras su jinete esté vivo, sin importar el grado de confianza que esa persona adquiera con el dragón.
'La Casa del Dragón' mostrará también cómo esa sumisión provocará la extinción de estos reptiles, los cuales serán obligados a luchar entre ellos al estallar la llamada Danza de los Dragones, la cual fue una guerra de sucesión fratricida entre la propia dinastía Targaryen y será la que los llevará a su desaparición durante dos siglos, hasta su resurrección de manos de Daenerys.