MADRID, 15 Abr. (CulturaOcio) -
Al final de la séptima temporada de Juego de Tronos, Cersei contrató a la Compañía Dorada, un ejército de mercenarios de Essos, y le encarga a Euron Greyjoy que los transporte a través del Mar Estrecho. Una vez que han llegado en la octava entrega, el comandante de la compañía, Harry Strickland describe a todas las tropas que han traído, pero Cersei no está satisfecha, ya que le dijeron que habría elefantes... pero los paquidermos no han llegado. El líder de la Compañía Dorada se justifica, asegurando que estas criaturas no están hechas para las travesías marítimas. Cersei, decepcionada, se dedica a mencionar la falta de elefantes en cada conversación que tiene el resto del episodio.
Una broma que solo han entendido los fans de los libros. En el material original, la Compañía Dorada se formó a partir del lado perdedor de la Rebelión de Blackfyre, un levantamiento fallido de un bastardo de Targaryen que tuvo lugar unos 100 años antes de los acontecimientos de los libros. Después de que el líder de la rebelión muera, los supervivientes huyen a Essos y forman una compañía para mantener viva su causa. Tras múltiples intentos fallidos de reclamar el Trono de Hierro para los Blackfyres en las décadas siguientes, Barristan Selmy se hizo famoso por matar a su último líder.
Según el libro, la compañía incluye "quinientos caballeros, cada uno con tres caballos. Quinientos escuderos, con una montura cada uno. Mil arcos, ballestas, otro tercio de los arcos de doble cuerno y tendones del este. Mejor que estos eran los grandes arcos largos de tejo que llevaban los arqueros de la sangre de Poniente, y lo mejor de todo eran los grandes arcos de corazón dorado atesorados por el negro Balaq".
Pero sobre todo lo que todos recuerdan de la Compañía Dorada son los paquidermos. "Y los elefantes", dice un soldado después de dar un resumen de sus fuerzas. "No debemos olvidar a los elefantes", de los que poseen 24 ejemplares.
La Compañía Dorada aparece por primera vez en Danza de dragones, y en los libros apoya a un joven llamado Aegon, supuestamente el verdadero hijo de Rhaegar Targaryen.
La mayoría de los lectores asumen que Aegon es en realidad un impostor, y el hecho de que lo hayan eliminado de la serie significa que no es probable que sea un contrincante importante en el desenlace. Aunque la ficción de HBO no incluyó nada de esto, sí hicieron un guiño a la trama mencionando los elefantes.
Cersei y los elefantes fueron de lo más comentado del episodio, y las redes sociales se llenaron de bromas sobre la obsesión de la Reina con los animales.
"¡A Cersei le prometieron los malditos elefantes!", recordó un fan en Twitter. "¿Cersei creía que los elefantes serían rivales para los dragones? Parece bastante insistente con ellos", apuntó otro seguidor.
"Cersei acaba de acostarse con Euron y todo en lo que piensa es los elefantes perdidos. El sexo con Euron debe ser una basura", añadió otro tuitero.
Aunque Cersei no consigue sus elefantes en la serie, en los libros "unos pocos" sobreviven y llegan a Poniente, tal como revela un adelanto del próximo libro de George R. R. Martin, Vientos de Invierno.