MADRID, 30 Mar. (CulturaOcio) -
The Walking Dead es una de las series más populares de la actualidad. La aclamada ficción zombie de la AMC demuestra un gran abanico de recursos en lo que al maquillaje y recreación de sus zombies se refieren pero alguien debería decirle a Greg Nicotero y compañía que deberían destinar una parte de su millonario presupuesto al CGI... y a corregir gazapos como este.
Carl (Chandler Riggs) es el protagonista de un nuevo desliz del drama post-apocalíptico. Todo tiene lugar en la emisión del último episodio, el 7x15 titulado Something they Need (Algo que ellos necesitan), en el que Rick y un grupo de Alexandria invaden Oceanside para arrebatarles sus armas.
Las cosas se ponen algo tensas con la terca líder de la comunidad exclusivamente femenina, Natania, llegando incluso a amenazar la vida de Tara... si no fuese por la repentina aparición de un grupo de caminantes, que obliga a todos a hacer piña para acabar con los pútridos enemigos comunes.
Y es entonces cuando Carl aparece apuntando a los zombies con su ojo tuerto y vendado... ese mismo que perdió durante el transcurso de la temporada 6. Obviamente, es un error humano y el joven intérprete aparece apuntando de forma intuitiva, con el que será su "ojo bueno" jugando a un 'shooter' en la Wii, pero no deja de sorprender que en una serie donde la amputación y mutilación son el pan de cada día ocurra este tipo de errores.