MADRID, 6 Sep. (CulturaOcio) -
Ahsoka ha alcanzado ya el ecuador de su primera temporada. Y en su cuarto episodio, la serie de Star Wars continúa sorprendiendo con su historia, protagonizada por el personaje encarnado por Rosario Dawson. Se trata de uno de los proyectos de la franquicia más aclamados por la crítica y el público en los últimos años que, de nuevo, ha generado gran expectación con un impactante final de capítulo.
((ATENCIÓN: ESTA NOTICIA CONTIENE SPOILERS))
Durante la cuarta entrega, Ahsoka y Sabine tratan de detener los planes de Morgan Elsbeth de saltar al hiperespacio hacia otra galaxia en busca del Gran Almirante Thrawn. Para ello deben enfrentarse a todos sus secuaces, es decir, a Baylan Skoll y su aprendiz Shin Hati, al Inquisidor Marrok y a un puñado de droides.
Ahsoka es quien asume la responsabilidad de medirse a Skoll, el gigantesco Jedi caído al Lado Oscuro. Su objetivo es tomar el mapa celestial y destruirlo antes de que Morgan Elsbeth establezca las coordenadas del destino en el Ojo de Sion. Pero al hacerlo, su mano resulta herida por la magia con la que se abrió el mapa. Y cuando se descentra al ver a Sabine, Skoll aprovecha para asestar un letal golpe.
La protagonista de la serie cae por un barranco hacia las embravecidas aguas del planeta Seatos. Su destino queda en el aire, si bien Skoll, Hati y Sabine parecen darla por muerta. Pero, en los compases finales del epsiodio, Ahsoka despierta. La guerrera, sin embargo, no está en el mar, sino en un misterioso paraje oscuro con pasillos de luz. Y lo que ve allí levanta aún más dudas.
"Hola, Chulita", le dice una voz muy reconocible, la de Anakin Skywalker. "¿Maestro?", responde ella, sorprendida. "No esperaba verte tan pronto", contesta él. Es entonces cuando Ahsoka se gira y los personajes de Rosario Dawson y Hayden Christensen comparten mirada cómplice y una sonrisa. Para los fans menos versados en Star Wars, esta escena puede parecer especialmente extraña. En el momento en que transcurre la serie, Anakin no solo ya se había convertido en Darth Vader, sino que había muerto años atrás al salvar a su hijo Luke de las garras de Palpatine.
¿DÓNDE ESTÁ AHSOKA?
Un razonamiento que puede surgir entonces es que Ahsoka efectivamente también ha muerto y está en el más allá, reencontrándose con su Maestro. Pero esto no es así, y la explicación se encuentra en la temporada final de Star Wars: Rebels. En realidad, la protagonista está muy viva y ha accedido a lo que se conoce como Mundo entre Mundos.
Este lugar místico está alejado del plano terrenal, pero conectado a él a través de portales repartidos por el espacio-tiempo. En Rebels, Ezra Bridger entró al Mundo entre Mundos a través del Templo Jedi de Lothal. Una vez allí, rescató a Ahsoka de la lucha contra Darth Vader que había sucedido en Malachor años atrás.
El Mundo entre Mundos es, por tanto, un enclave muy poderoso desde el que puede alterarse el tiempo. Lo que se desconoce es cómo Ahsoka y Anakin han conseguido entrar en él. En el caso de la primera, puede que bajo las aguas de Seatos se escondiese un portal secreto. O puede que Anakin ya estuviera allí y, como hizo Ezra, la rescatase antes de morir.
En el caso de Skywalker, su presencia allí es un gran misterio que deberá resolverse en el próximo capítulo. El quinto episodio de Ahsoka, que vuelve a estar dirigido por Dave Filoni -el creador de la serie y también de la guerrera hace ya 15 años- se estrenará en Disney+ el miércoles 13 de septiembre.