MADRID, 24 Ago. (CulturaOcio) -
La temporada 2 de Solo asesinatos en el edificio ya ha llegado a su fin. Tras 10 episodios, Mabel (Selena Gomez), Charles (Steve Martin) y Oliver (Martin Short) han resuelto el gran misterio de la temporada: ¿quién mató a Bunny Folger?
((ATENCIÓN: ESTA NOTICIA CONTIENE SPOILERS))
El primer gran caso resuelto por Cinda Channing es el de Becky Butler, una oficinista de Oklahoma que aparentemente fue asesinada por el alcalde de la ciudad en un ataque de lujuria. Sin embargo, la temporada 2 revela que Becky no fue asesinada y ni siquiera estaba desaparecida. En realidad ella es Poppy White, la productora de Cinda.
Harta de su vida como asistente del alcalde, Becky decidió hacer un descanso y comenzar una nueva vida. Al desaparecer de su ciudad de Oklahoma, se cortó el pelo, comenzó a usar gafas y esperó. El caso llamó la atención de Cinda, dándole la idea de un exitoso podcast sobre crímenes reales, All Is Not OK in Oklahoma. El podcast es tan exitoso que los esfuerzos de investigación de Cinda dieron como resultado que el alcalde fuera enviado a prisión por un asesinato que ni siquiera sucedió.
En un intento por ganar fama en el mundo del true crime, Poppy y Kreps llevaron a cabo el asesinato de Bunny Folger, de manera que podrían hacer un exitoso podcast y ganarse el favor de Cinda.
Cinda ni siquiera se dio cuenta de que Poppy en realidad era Becky Butler, y luego descubrió que había sido utilizada por Poppy para lograr su objetivo. Poppy es descubierta y tanto ella como Kreps son detenidos.
Con los asesinatos del edificio resueltos oficialmente, Oliver, Charles y Mabel toman caminos separados y terminan su podcast. Charles regresa a su serie Brazzos. Mabel comienza las obras en su apartamento, mientras que Oliver cumple su sueño de dirigir un espectáculo en Broadway.
Además, el último capítulo incluye un sorprendente cameo. Un año más tarde, Charles, Oliver y Mabel se reencuentran en la noche de estreno del espectáculo de Oliver. Charles tiene un papel principal junto a Ben Glenroy, encarnado por Paul Rudd.