MADRID, 15 Ene. (CulturaOcio) -
Tripulación perdida (Skeleton Crew), ha llegado a su fin y sus ocho episodios ya están disponibles en Disney+. Por el momento no se ha anunciado que la serie vaya a continuar con una segunda temporada, pero independientemente de que lo haga o no, sin duda su desenlace ha abierto nuevas posibilidades en el universo Star Wars que conviene tener en cuenta.
((ATENCIÓN: ESTA NOTICIA CONTIENE SPOILERS))
Titulado Los buenos de verdad, el capítulo retoma la acción justo en el momento en que terminaba la anterior entrega, con Jod haciéndose pasar por emisario de la República y blandiendo una espada láser ante los niños y sus padres. Continuando su farsa, el pirata baja el arma y tranquiliza a los adultos, recomendándoles que vigilen bien a sus hijos, y se dispone a visitar al Supervisor con Fern y su madre.
"Está abandonado", observa Jod cuando el trío entra a la descuidada oficina del misterioso líder de At Attin, algo que no parece preocupar especialmente a la subsecretaria Fara, quien explica que el Supervisor rara vez concede audiencias. Es entonces cuando la ficción da respuesta a uno de sus mayores misterios, la verdadera identidad de la máxima figura de autoridad del planeta... que resulta ser una máquina (a quien, en su versión original, presta su voz Stephen Fry).
"¿Os gobierna un droide?", pregunta un asombrado Jod. "Como marca la gran labor", afirma Fara. El pirata trata entonces de engañar al Supervisor con su mentira y este se muestra sorprendido, esgrimiendo que empezaba a dudar de que el planeta fuese a volver a recibir una visita de un emisario... algo que da a entender que ha pasado bastante tiempo desde la última. Y no es para menos, ya que los ciudadanos de At Attin, ajenos a los sucesos de la galaxia, no saben nada de la caída de la República que ellos conocían, el oscuro periodo del Imperio y el nacimiento de una Nueva República.
Así pues, se confirma que el planeta, una de las "Joyas de la Antigua República" y su Casa de la Moneda, llevaba siglos oculto, incomunicado con el resto de la galaxia, dedicado a una "gran labor" que ya de nada servía.
En todo caso, el droide revela que el último mensaje que recibió le advertía de que todos los Jedi eran unos traidores y manda apresar a Jod. Sin embargo, este arremete contra la máquina, destruyéndola, lo que deja sin energía al planeta. Con la reticente ayuda de Fara, Jod consigue que su tripulación atraviese la barrera y comience a invadir At Attin.
EL PASADO DE JOD
Aparte de aclarar de una vez por todas el misterio de At Attin, el último episodio de la ficción revela también el pasado del personaje de Jude Law, explicando si verdaderamente es un Jedi. Tal y como le confiesa el propio Jod a Wim, muchos años atrás, cuando solo era un niño hambriento, fue encontrado y acogido por una Jedi que vio su potencial y le instruyó en la Fuerza... hasta que fue ejecutada.
La historia del pirata confirma así que este creció en el periodo del Imperio galáctico, cuando los Jedi se habían extinguido casi por completo y los pocos que quedaban eran cazados sin piedad, por lo que, a pesar de ser sensible a la Fuerza, nunca llegó a formar parte de la Orden ni a recibir un entrenamiento formal.
Jod no muere al final de Tripulación perdida, por lo que es posible que los fans no hayan visto lo último de él y que regrese, o bien en una segunda temporada de Tripulación perdida o bien en otra serie distinta. En todo caso, su pasado abre la posibilidad de que haya otros como él en la galaxia, personas sensibles a la Fuerza que, por haber crecido durante el Imperio, no han recibido una educación Jedi, algo que no solo se refiere a las habilidades sino también a la moral, es decir, puede que, aparte de Jod, haya más de una persona con poderes Jedi pero de moral cuestionable.
LA BARRERA ES DESTRUIDA
En los últimos compases de la ficción, los niños y sus padres consiguen destruir la barrera que rodea At Attin, permitiendo así el paso de la ayuda enviada por Kh'ymm. "Contactaré con la Nueva República, son los mayores caza piratas de la galaxia", aseguraba poco antes la criatura a KB. Tal y como esperaban, las naves aliadas consiguen derrotar a los invasores y Wim las mira extasiado, una escena que podría estar adelantando que el niño se convertirá en un piloto de la República.
El desenlace de Tripulación perdida supone un punto de no retorno para At Attin ya que, tras la destrucción de su barrera, dejará de estar oculta y tendrá acceso a toda la galaxia, para bien y también para mal. Con este final y teniendo en cuenta que todos los personajes acaban vivos, la ficción tiene el potencial de una segunda temporada, pero habrá que esperar para ver si recibe luz verde... o no.