MADRID, 25 Abr. (CulturaOcio) -
Juego de tronos comenzó en 2011 como una adaptación del primer libro de la saga de novelas Canción de Hielo y Fuego de George R.R. Martin. A medida que avanzó la serie, fue añadiendo cambios respecto al material original, tanto es así que actualmente son historias completamente independientes. Y aunque Martin no siempre apoyó la idea de agregar estos ajustes, entiende por qué la serie se ve obligada a hacer cambios.
"Bueno, sí, claro que tienes una reacción emocional", compartió Martin con Rolling Stone sobre las desviaciones de la serie de su narrativa. "Quiero decir, ¿preferiría que lo hicieran exactamente como lo hice? Claro. Pero también he estado al otro lado. He adaptado el trabajo de otras personas y no lo hice exactamente la forma en que lo hicieron, así que...", confesó el escritor.
Martin todavía está trabajando en su saga, después de que la sexta temporada superara los eventos de los libros, lo que hace que tanto los espectadores como los lectores no sepan lo que sucederá. El autor señala que fue su ritmo de escritura lo que impactó en gran medida la serie de televisión, pero que ambas narraciones son desviaciones de la misma premisa.
"Parte de la desviación, por supuesto, se debe a que he sido muy lento con estos libros", admitió el autor. "Realmente debería haber terminado esto hace cuatro años y si lo hubiera hecho, tal vez habría una historia diferente aquí. Son dos variaciones de la misma historia, o una historia similar, y se obtiene eso cada vez que se adapta algo".
Martin comparó el caso de Juego de Tronos con Lo que el viento se llevó, ya que en los libros la protagonista Scarlett O'Hara tiene tres hijos mientras que en la película solo uno. Para el escritor, ambas versiones son "fieles al espíritu" de la historia algo que espera que ocurra tanto con Juego de Tronos como con Canción de Hielo y Fuego.