MADRID, 19 Nov. (CulturaOcio) -
El cuarto episodio de la séptima temporada de The Walking Dead tuvo 85 minutos de duración, es decir, como un largometraje. Y es que según ha confirmado un miembro del equipo de la serie, algún día será una película que llenará las salas de cine.
Así lo ha confirmado en una reciente entrevista a Comicbook.com el productor ejecutivo y showrunner de The Walking Dead, Scott M. Gimple, quien aseguró que "de una manera u otra pasará algún día. Pienso que sería genial".
No obstante, no ha apuntado ninguna fecha posible para ello porque primero el equipo se centrará en la serie, que ha renovado por una octava temporada en AMC y está previsto que llegue hasta la undécima.
Además, la cadena estadounidense también está emitiendo Fear The Walking Dead, el spin-off de la serie del que ya se han emitido dos temporadas y se está rodando la tercera.
Lo que está claro es que los productores no quieren desaprovechar el tirón que la serie tiene en televisión, y esperan trasladar la historia al cine para recaudar una buena suma de dinero en taquilla. The Walking Dead tiene alrededor de 12 millones de espectadores cada capítulo, por lo que en las salas será un éxito seguro.
En la entrevista Gimple bromeó sobre que actores le gustarían para el reparto. Éstos son "William Shatner como Rick, Edward James Olmos como Daryl. Y el gran show, Matthew Fox como El Gobernador".
UNA DE LAS MEJORES TEMPORADAS
De momento los seguidores podrán seguir la serie cada domingo en FOX, en episodios emitidos con sólo media hora de diferencia respecto a su emisión en EEUU, a través de la cadena AMC.
El próximo domingo se emite el quinto episodio de la séptima temporada, que esta siendo bastante apasionante. La encrucijada en la que se encuentra Daryl, recluido con Los Salvadores, y Rick, obligado a servirles, son parte del giro que ha tomado The Walking Dead en su séptima temporada, que albergará rivalidades, muertes y luchas de poder.
No sólo la aparición de Negan y su grupo supone un cambio de rumbo para Rick y los suyos. En el segundo capítulo ya aparecieron El Reino, con el Rey Ezekiel y su terrible tigresa Shiva, que todavía no se sabe el papel que jugarán. A ellos sólo les conocen Morgan y Carol, y de momento parece un lugar bondadoso que también ha sido sometido por Los Salvadores, a los que rinden tributo alimenticio.