MADRID, 17 Abr. (CulturaOcio) -
El jardinero, la serie española que mezcla thriller y romance, se ha convertido en todo un éxito en Netflix. Pero a pesar de encabezar el ránking de lo más visto en varios países, la pregunta sobre su continuidad sigue en el aire.
Y es que, a pesar de su éxito fulgurante y el entusiasmo del público por el thriller psicológico protagonizado por Álvaro Rico, Cecilia Suárez y Catalina Sopelana, la respuesta oficial de Netflix es, por ahora, un enigmático silencio.
El jardinero se estrenó el 11 de abril y rápidamente escaló posiciones en el Top 10 global de Netflix, llegando incluso al cuarto puesto en Estados Unidos y liderando en varios países. Sin embargo, en la propia plataforma figura como "miniserie" o "limited series", una etiqueta que suele indicar que la historia fue concebida para concluir en sus seis episodios, sin planes de expansión.
El desenlace de la serie, sin embargo, ha dejado la puerta entreabierta. El final abierto -con Violeta pidiéndole a Elmer que mate por ella- ha encendido las especulaciones y las ganas de más entre los fans, que no dejan de reclamar una segunda entrega en redes sociales. A pesar de esto, fuentes cercanas a la producción y medios especializados coinciden en que la narrativa fue pensada como autoconclusiva, y que, salvo un cambio de rumbo motivado por el éxito arrollador, no hay planes concretos para continuar la historia.
El precedente de otras "miniseries" de Netflix que, tras arrasar en audiencias, han conseguido una segunda temporada... o han incluso continuado con spin-offs, mantiene viva la esperanza. La decisión final dependerá en gran medida de los datos de visualización y del interés sostenido que El jardinero despierte en las próximas semanas.
Por ahora, El jardinero se mantiene como una de las apuestas más potentes y arriesgadas de la ficción española reciente en Netflix, pero su futuro es incierto. Los espectadores deberán esperar a un anuncio oficial, aunque la realidad es que, por el momento, la segunda temporada parece improbable, aunque no imposible.
