Un cóctel explosivo de heroína y alcohol terminó con la vida de Cory Monteith, el actor de la famosa serie 'Glee' que falleció el pasado mes de julio, según ha concluido la forense Claire Thompson.
El intérprete de 31 años fue encontrado muerto en la habitación de un hotel de Vancouver (Canadá), donde la policía encontró una esponja con restos de drogas y una aguja, así como dos botellas de champán.
Según informa la BBC, la forense ha señalado que la muerte de Monteith fue "accidental". Su nivel de alcohol en sangre era del 0,13 por ciento, con un nivel "moderado" de intoxicación. Además, el informe también revela la presencia de "morfina, codeina y un derivado de la heroína".
Las cámaras de seguridad del hotel mostraron al actor cuando se dirigía solo de madrugada a su habitación. A la mañana siguiente, el personal del hotel lo encontró en el suelo inconsciente. "Llevaba muerto varias horas y la reanimación no fue posible", concluye el informe forense.