MADRID, 12 Oct. (CulturaOcio) -
El romance de Kit Harrington y Rose Leslie ha traspasado las fronteras de Poniente emocionando a los fans de Juego de Tronos. Ahora, anunciado su compromiso, los seguidores del drama medieval quizás cambien de opinión cuando sepan que la boda paralizará el rodaje de la esperada temporada final, un desenlace que de por sí se hará de rogar.
El Rey en el Norte y la salvaje no conciben el día más especial de sus vidas sin sus compañeros de reparto tras más de seis años de unión, algo que supondrá un problema para la producción de la serie. Así lo ha confirmado el flamante novio en El Show de Jonathan Ross donde, en tono de broma, cuenta cómo llamó al productor para darle la buena nueva.
"Me caso, y en realidad es culpa tuya", le comuncó Harrington que le recordaba así que fue su trabajo en la serie de HBO lo que hizo surgir un romance que fue de la pequeña pantalla hasta detrás de las cámaras.
Ni corto ni perezoso, el actor que da vida a Jon Snow le espetó al productor: "Tienes que tener en cuenta la boda para Juego de Tronos, por cierto... Todos tienen que estar ahí, así que habrá que cerrar todo el asunto". Aunque sea solo por un día, Harrington quiere que el equipo se olvide del Rey de la Noche para asistir a la boda durante el largo rodaje de la 8ª temporada que se extenderá hasta el próximo verano.
La filmación de la última tanda de capítulos de Juego de tronos comenzará este mes de octubre con un presupuesto de 15 millones de dólares para cada una de las seis entregas. Un número menor de episodios, que tendrán una mayor duración, como ya se ha visto en la reciente séptima temporada. La mayoría de los protagonistas ya se encuentra en Belfast en las primeras lecturas del guión de esta octava temporada que no se estrenará hasta 2019.
