MADRID, 19 Abr. (CulturaOcio) -
Durante las pasadas temporadas de Juego de tronos, Daenerys Targaryen ha tratado de alejarse de la imagen de su padre, el Rey Loco, liberando a cuantos esclavos ha encontrado por su camino. La Rompedora de Cadenas parecía ser una candidata al Trono de Hierro justa y benevolente, pero la ejecución de los Tarly podría suponer su gran error que la apartase de los mandos de Poniente.
Daenerys mostró su lado más oscuro en la séptima temporada, cuando no dudó en quemar a Randyll y Dickon Tarly, quienes se niegan a jurarle fidelidad. Una ejecución que la khaleesi quería que sirviera de ejemplo para que todo Poniente supiera qué les espera a quienes no hincan su rodilla ante la Madre de Dragones.
Pero parece que ni Daenerys, ni muchos fans, vieron entonces cuáles podrían ser las enormes consecuencias de esta decisión. Y es que, a pesar de los esfuerzos de Tyrion por convencer a Daenerys de que no debería haberlo hecho, de que debería haberles apresado y confinarles en una fría y oscura celda hasta que cambiaran de opinión, la Targaryen los mató. Y esa decisión es irreversible.
Y más allá del enemigo que Daenerys se ha granjeado Samwell Tarly -y puede ser un rival importante, teniendo en cuenta sus grandes conocimientos y su influencia en Jon Snow e incluso en Bran- ahora muchos de los personajes supervivientes se están reuniendo en Invernalia, todo apunta a que aquella decisión de Daenerys finalmente será cuestionada, particularmente tras la llegada del Matarreyes, Jaime Lannister.
El adelanto del segundo episodio muestra a Jaime ante Daenerys. "Cuando era niña, mi hermano me contaba un cuento sobre el hombre que asesinó a nuestro padre", le dice la Madre de Dragones. "De todas las cosas que le haríamos a ese hombre".
AERYS, UN MAL EJEMPLO
Sin embargo, como los fans recordarán, Aerys era un personaje de lo más retorcido, y seguir su ejemplo, tal y como su Mano Tyrion le ha recordado en muchas ocasiones, no ayudaría a Daenerys a convertirse en una Reina justa y querida.
La llegada de Jaime, y su presencia ante la Reina, podría cambiar la visión que Daenerys tiene de su padre, revelando a la joven regente las verdaderas razones que llevaron a Poniente a levantarse en armas contra su rey y lo que a él, particularmente, lo llevó a convertirse en el Matarreyes.
Como le contó a Brienne en la segunda temporada, ese acto de traición supuestamente deshonroso -apuñaló al rey por la espalda siendo miembro de su Guardia Real- se realizó para salvar cientos de miles de vidas inocentes.
Cuando la guerra contra los rebeldes empezaba a estar perdida para los Targaryen, el padre de Daenerys ordenó esconder grandes cantidades de fuego valyrio debajo de Desembarco del Rey con la intención de prenderlo cuando llegaran los rebeldes. Para evitar este genocidio, Jaime rompió su juramento y asesinó al rey Aerys cuando éste le pidió que acabara con la vida de su padre, Tywin Lannister.
Algunos incluso teorizan que, si Daenerys sigue los pasos de su padre y se convierte en la Reina Loca, Jaime podría agregar Matarreinas a su lista de títulos en algún punto de la octava temporada.
Si el reino finalmente se entera de la verdad detrás de la muerte de su padre, esto dejará a Daenerys con dos opciones: condenar la locura de su progenitor o caer en ella. De cualquier manera, sacar a la luz su problemática historia familiar seguramente la colocará en un lugar aún más difícil en Invernalia, que no la ha recibido precisamente con los brazos abiertos.
Tampoco hay que olvidar el decisivo papel que parece va a jugar Sam, que -consciente de que la locura y la crueldad han sido compañeras habituales de los Targaryen durante generaciones- ahora parece haber cambiado radicalmente su opinión sobre la Rompedora de Cadenas.
