MADRID, 27 Feb. (EDIZIONES) -
Madres Forzosas, el spin-off de Padres forzosos ha llegado 29 años después que su predecesor a la pequeña pantalla. Y ha sido Netflix el encargado de producir el regreso de una de las sitcom familiares más entrañables de los años 80 y 90.
Pero no todo es amable y tierno en la sensiblera serie. Tras confirmarse la ausencia de las gemelas Olsen (Mary-Kate Olsen y Ashley Olsen) del proyecto, el equipo de Madres Forzosas pensó en tomarse con humor su decisión de no volver al proyecto que las dio a conocer.
El lugar de los hechos ha sido el primer episodio de la serie, titulado Our very first show, again (Nuestra primer programa, de nuevo). En el, el reparto bromea sobre la sospechosa ausencia de Michelle Tanner (caracterizada por las Olsen).
En la versión final, Stephanie (Jodie Sweetin) le pregunta a su padre (Danny Tanner, interpretado por Bob Saget) ¿dónde está mi hermana pequeña?. A lo cual, Tanner replica: "Bueno, Michelle os manda un beso pero está ocupada en Nueva York llevando su imperio de moda". En ese preciso instante, todos los actores dirigen una cómplice mirada a la cámara.
El autor confeso del chiste es John Stamos, que vuelve para recuperar su papel como tío Jesse: "Fue idea mía. Pensé, seamos simples y miremos a la cámara. Simplemente pensé que era divertido y transmitía la idea de que nosotros lo entendemos también".
Pero hay otra versión de la broma no se vio pues sólo fue rodada ante una audiencia en vivo y quizá los espectadores puedan llegar a ver en un futuro DVD o Blu-ray. El comentario jocoso en cuestión continúa la escena anteriormente descrita y en ella el tío Jesse lamenta la decisión de las gemelas de no regresar, rompiendo la cuarta pared para interactuar con el público mientras dice "¡un episodio!".
A continuación, el personaje de Stamos recibe una llamada telefónica y mientras sale de la cocina vuelve a dirigirse a la audiencia: "Son los abogados de las gemelas".
MADRES A LA FUERZA
Madres Forzosas sitúa su acción junto a la recientemente viuda y veterinaria D.J Tanner-Fuller (Candace Cameron Bure) que actualmente vive en San Francisco.
En esta ocasión, la aspirante a futura música y hermana pequeña de D.J, Stephanie Tanner (Jodie Sweetin), la eterna mejor amiga de D.J y madre soltera, Kimmy Gibbler (Andrea Barber), y su enérgica hija adolescente, Ramona (Soni Nicole Bringas), se mudarán todas juntas para cuidar de los tres hijos de D.J: Jackson (Michael Champion) el hijo mayor rebelde de 12 años, el obsesivo Max (Elias Harger) de siete, y el pequeño recién nacido, Tommy Jr (Messitt Twins).
