MADRID, 10 Abr. (CulturaOcio) -
El cuarto episodio de 'Falcon y el Soldado de Invierno' ha dejado una baja muy importante, pues la muerte de ese personaje afectará de lleno a los protagonistas y especialmetne al nuevo Capitán América ante un oscuro panorama que, por supuesto, abre no pocas incógnitas.
((ATENCIÓN: ESTA NOTICIA CONTIENE SPOILERS))
La muerte de Lemar Hoskins (Battlestar), el compañero y mejor amigo de John Walker, el nuevo Capitán América, deja destrozado al héroe y, lo peor aún, sin el muro de contención que era el joven, pues Walker se entrega totalmente a su lado más oscuro tras su dramática pérdida.
El cuarto capítulo reunió a Walker y Hoskins con Sam y Bucky. Como sucedió la primera vez, Walker rastreó a los protagonistas para obtener nueva información sobre los Sin Bandera. Aunque reticentes, deciden unir fuerzas, pero Walker, opta por ir por su cuenta.
Finalmente, en la batalla final contra la organización terrorista, Karli Morgenthau empujó accidentalmente a Hoskins demasiado fuerte, lo que provocó que saliera despedido contra un edificio, causándole la muerte. Esto deja a Walker sin su mejor amigo y, en cierta manera, provoca que los paralelismos con Steve Rogers, así como las comparaciones, sean más fuertes.
Inicialmente, Walker era un joven decente, de buen corazón, cuya elección por parte del Gobierno estadounidense para ser el nuevo Capi parecía la adecuada. Al igual que Rogers, Walker es un soldado condecorado. Sin embargo, a diferencia de su predecesor, Walker tiene un punto oscuro que ha provocado suspicacias que, ahora, se acentúan.
La muerte de Hoskins hace que se venga a la cabeza lo que le sucedió a Rogers en 'Capitán América: El primer vengador', donde presenció la presunta muerte de su mejor amigo, Bucky, en el tren que transportaba a Zola. El personaje de Chris Evans también sufrió mucho por la pérdida de su amigo. Sin embargo, no buscó vengarse, ni desquitarse con nadie, llevando su duelo en soledad.
Esto convierte la muerte de Hoskins en la prueba de fuego de Walker y, como muchos podían intuir, demuestra que no es digno de portar el escudo del Capi. Cegado por la ira, decide tomar una decisión que marcará su destino: se inyecta el suero del súper soldado para perseguir a Karli y los demás terroristas.
Logra alcanzar a uno de los miembros, al que golpea con el escudo del Capi hasta matarlo, manchando el icono de sangre. Una escena tremendamente simbólica, que muestra que Walker tiene un carácter más inestable y que remarca la sensación de que es imposible encontrar a una persona tan excepcional como Rogers.
"No ha habido otro Steve Rogers, ¿verdad?", llega a decir Zemo cuando explica ante Bucky y Sam su controvertida teoría sobre los supersoldados, el supremacismo y los Vengadores.
La reacción del nuevo Capitán América viene, además, a darle la razón al propio Lemar Hoskins que afirmó tan solo unos minutos antes lo siguiente: "El poder solo hace que una persona saque más de sí misma". Y dentro de Walker hay mucha violencia, puede que ahora que se a inoculado el suero... sin control.
Ver el escudo machado de sangre, así como apreciar que este Capitán América no sabe trabajar en equipo y cree que el traje sí hace al monje provoca un giro en la trama de la serie de Disney+. Por un lado, remarca lo extraordinario que era Steve Rogers, por otro, prepara el terreno para que Sam Wilson tome el relevo. Sin el muro de contención que era Lemar, Walker estará desatado, mostrando la otra cara de lo que significa ser el superhéroe más importante de Estados Unidos.
Habrá que ver si, definitivamente, Walker termina abrazando su lado oscuro y mancilla el legado del Capitán América y se transformar en el peligroso Súper Patriota o el U.S. Agent de los cómics. El penúltimo episodio de la ficción llegará el 16 de abril, el final se acerca.
