MADRID, 22 Nov. (CulturaOcio) -
Netflix y el Templo Satánico han alcanzado un acuerdo, después de que la organización presentara una demanda de 50 millones de dólares en la que alegaba que Las escalofriantes aventuras de Sabrina violaba los derechos de autor al usar una estatua de la deidad Baphomet, similar a la utilizada por el templo.
Según Variety, la organización ha anunciado en un comunicado que ha llegado a un acuerdo amistoso, que exige a Netflix que reconozca los elementos copiados de la estatua en los créditos de los episodios. Sin embargo, los otros términos del acuerdo están bloqueados bajo un acuerdo de confidencialidad.
La demanda inicial afirmaba que cuatro episodios de Las escalofriantes aventuras de Sabrina mostraban una estatua de Baphomet prácticamente idéntica a la que usa el Templo Satánico. Dicha estatua, que fue construida entre 2013 y 2014, se inspiró en las representaciones de la deidad que se remontan al siglo XIX.
"Dado el uso de la estatua Baphomet en la serie para representar un culto caníbal malvado, una percepción falsamente asociada con el satanismo incluso en los tiempos modernos, Templo Satánico habría negado su uso a los creadores", alegó la asociación.
La estatua original de Baphomet fue desvelada en 2015 y costó alrededor de 100.000 dólares. Templo Satánico pretende desplazar la imagen de Baphomet al capitolio de Arkansas, donde se encuentra un monumento dedicado a Los 10 Mandamientos, como símbolo de la libertad religiosa y de expresión.
La primera temporada de Las escalofriantes aventuras de Sabrina presenta a una adolescente que lucha por reconciliarse con su doble naturaleza, mitad bruja, mitad mortal, mientras combate fuerzas del mal que la amenazan a ella, a su familia y al mundo que habitan los humanos.
Las ficción, protagonizada por Kiernan Shipka, ha cautivado a los espectadores desde su estreno el pasado 26 de octubre y, tanto es así, que ya está en marcha su segunda temporada.
