MADRID, 11 Sep. (CulturaOcio) -
Outlander ha regreso tras más de un año de parón... y lo hizo por la puerta grande. El drama de época protagonizado por Sam Heughan y Caitriona Balfe acogió en el estreno de su esperada tercera temporada una gran muerte que cambiará todo en lo que resta de la entrega episódica. Pero, ¿De qué manera?
((( ATENCIÓN: ESTA NOTICIA CONTIENE SPOILERS )))
La tercera temporada de Outlander inició resolviendo el brutal 'cliffhanger' dejado al final de la segunda entrega episódica, con Jaime y Claire separados en el tiempo por dos siglos. Y es que mientras Claire estaba teniendo a su bebé en los años 40, Jaime se dirigía 200 años antes a una más que probable muerte en la Batalla de Culloden.
Finalmente Jaime sobrevive... y logra matar a Black Jack Randall (Tobias Menzies) tras un épico combate singular, que no sirvió para dar la victoria a los escoceses, eso si. Su muerta era largo tiempo deseada después de que los fans vieran todo lo que hizo en la primera y la segunda temporada de la serie.
Pero también tendrá su gran eco en el resto de esta tercera temporada de Outlander. Randall siempre ha sido el gran villano de la serie. Básicamente era demasiado bueno en su trabajo, siendo el malo, como para que los guionistas pudieran siquiera pensar en acabar con él, como ocurre en los libros en los que se basa la ficción.
Su muerte abre la puerta al próximo gran villano de Outlander y deja claras tres cosas: nadie está salvo en la serie, un nuevo antagonista aparecerá en la tercera temporada y los fans sólo podrán disfrutar de Tobias Menzies la mitad del tiempo respecto a las dos anteriores entregas episódicas tras la muerte de su antepasado.