MADRID, 4 Jul. (CulturaOcio) -
Jeffrey Dean Morgan fue anunciado como uno de los fichajes estrella de la cuarta temporada de The Boys. El actor que da vida a Negan en The Walking Dead y que encarnó, entre otros personajes, a El Comediante en Watchmen de Zack Snyder, se sumó a la ficción de Prime Video para dar vida a Joe Kessler, un agente de la CIA y viejo amigo y compañero de Carnicero.
Ahora, el sexto capítulo de esta nueva tanda ha revelado el verdadero y sorprendente origen de este personaje. Un giro argumental del que la serie basada en los cómics de Garth Ennis ya había dado importantes pistas sobre las que algunos espectadores ya habían cimentado sus propias teorías... que ahora se han visto confirmadas.
((ATENCIÓN: ESTA NOTICIA CONTIENE SPOILERS))
Hay que recordar que en el anterior capítulo de The Boys, Carnicero fingió la muerte de Sameer Shah, el científico que creó el virus capaz de matar a todos los superhéroes, y lo secuestró para poder producir más virus. En el sexto episodio, el personaje encarnado por Karl Urban sigue presionando, junto a su amigo Joe Kessler, al científico, que se encuentra encadenado dentro de un almacén abandonado que Carnicero ha convertido en un laboratorio, para que replique el virus.
Carnicero le da a Sameer una semana para que tenga lista la sustancia... y encarga a Joe que "no deje que se vuelva a dormir". En una secuencia posterior, Carnicero tose una especie de líquido negro mientras habla con la alucinación de Becca, su mujer fallecida que solo existe en su mente. La Becca imaginaria le dice a Carnicero que irá por un camino oscuro si cree que desatar un virus letal solucionará todo y le pregunta por Ryan. Carnicero justifica sus acciones diciendo que lo que está haciendo es por un bien mayor, para acabar con Patriota.
"¡Hostia, deja de rayarme la cabeza! Estoy intentando salvar el mundo, coño, correrán ríos de sangre. No puedo hacer lo que hay que hacer y además complacerte", dice casi agonizando. "Billy, venga. ¿Salvar el mundo? ¿En serio? Vas a matar a un Patriota para que acabe habiendo otro igual", le reprocha Becca que no es otra cosa que su propia conciencia confrontando sus más que discutibles actos.
Poco después, Kessler también intercambia impresiones con Carnicero... y le cuenta cómo, después de regresar de su última misión sobre el terreno, volvió intentando ser un buen tipo, un buen esposo y buen padre, pero en realidad quería torturar a la gente. "De pronto una noche, comiendo unas putas alitas de pollo deshuesadas, lo vi claro como el cristal. Aquel tipo que sacaba la basura y veía el canal de deportes no era yo. A mi verdadero yo lo que le gusta es oírlos gritar", dice Joe que con esta anécdota, lo que pretende es convencer a Carnicero de que saque su lado violento porque, en realidad, es lo que son.
Ya en la escena final del episodio 6, Carnicero le entrega lo que necesita a Sameer para crear un nuevo lote del virus asesino de Súpers. Sameer advierte que fortalecer el virus al nivel suficiente para matar a Patriota supondrá crear un patógeno extremadamente potente y contagioso que se transmitirá por el aire. "Nadie con el compuesto V en sangre estaría a salvo. Una jodida pandemia mundial. No hablamos solo de matar al Patriota", avisa.
"NUNCA HABLAMOS DE UN GENOCIDIO"
La alucinación de Becca vuelve a aparecer y le dice a Carnicero que no siga adelante con este plan, que incluiría a sus amigos Kimiko y, también a Ryan, mientras que Kessler está emocionado con la posibilidad de "cargárselos a todos". Pero entonces Carnicero duda: "Nunca hablamos de un genocidio".
Entonces, Becca y Kessler comienzan a gritar cada uno sus argumentos a Carnicero a favor y en contra de la "matanza" que supondrá desatar ese virus. Cuando la tensión comienza a ser casi insoportable, Kessler se dirije a Becca y le ordena, de muy malas maneras, que se calle. Es así como se revela que Kessler en realidad no existe. "Un momento, ¿puedes verla? ¿Y por qué coño hablas como si fueras yo?", dice desorientado Butcher.
Entonces la serie muestra un plano del personaje de Urban hablando solo, dirigiendo sus palabras hacia la nada. La inquietante y desquiciada estampa que, desde el principio, ha observado su rehén, el lisiado Sameer .
Kessler era una persona real, pero murió durante una operación militar en Afganistán, concretamente en el Valle de Panshir, tal y como revela. Carnicero no salvó a Kessler y ha estado imaginando su contribución a la lucha contra los Súpers todo este tiempo, cuando en realidad ha estado hablando solo y haciendo todo el trabajo que creía que Kessler ha estado haciendo por él.
Carnicero está indudablmente sorprendido ante esta revelación, pero no está claro si aceptará esta parte de su psique, como ya ha hecho con Becca, o la rechazará. Pese a este giro de la serie, Kessler sí es un personaje real en los cómics, aunque bastante diferente de la versión que se muestra en la adaptació de Prime Video.