MADRID, 21 Abr. (CulturaOcio) -
El último episodio de la tercera temporada de The Mandalorian ha cerrado muchas de las tramas que la serie había ido abriendo desde su primer capítulo. Una de ellas era el destino de Baby Yoda. El pequeño Grogu era un huérfano superviviente de la Orden 66 que los imperiales querían para sus experimentos. Protegido por Din Djarin, al fin se ha desvelado cuál es su lugar en la galaxia.
((ATENCIÓN: ESTA NOTICIA CONTIENE SPOILERS))
Al final del episodio, Din le pide a la Armera que le deje adoptarlo como hijo de manera oficial para que pueda ser considerado mandaloriano. La líder del clan de los Hijos de la Guardia acepta y bautiza al bebé como Din Grogu. El niño asume así el primer nombre de su nuevo padre, con quien vivirá para siempre. Sin embargo, ese nombre ha sido percibido con extrañeza puesto que ha roto con la continuidad de Star Wars.
Para los mandalorianos, el significado del nombre y la familia es muy importante. Y durante décadas, todos ellos habían tomado como herencia no el nombre de sus progenitores, sino el apellido. Es el caso de la casa Kryze a la que pertenece Bo-Katan, la casa Wren a la que pertenece Sabine, la casa Vizsla a la que pertenecía el fallecido Paz... Incluso eso mismo ocurre con Jango Fett y Boba Fett.
Siguiendo esa lógica, Baby Yoda debería haberse llamado Grogu Djarin, no Din Grogu. Este sorprendente cambio en The Mandalorian a priori no tiene ninguna explicación y rompe por completo con la tradición establecida por la saga años atrás.
Existe la posibilidad de que la serie indague en ello más adelante con su supuesta cuarta temporada, que sigue sin oficializarse. Sin embargo, también es muy probable que el equipo de The Mandalorian sencillamente lo deje pasar y Din Grogu se quede con su nuevo nombre sin dar más rodeos al respecto.