MADRID, 9 Ago. (CulturaOcio) -
'The Sandman', la ambiciosa adaptación televisiva de la aplaudida novela gráfica de Neil Gaiman, ha desembarcado en Netflix cautivando al público con su hipnótico y misterioso universo. Además de presentar a Sueño (Tom Sturridge), la ficción ha mostrado a otros de los Eternos. Y no, no están relacionados con los superhéroes de Marvel, pues son los seis hermanos de Morfeo, los cuales son divinidades que vigilan, guían y protegen a todos los mortales en el mundo creado por Gaiman.
En el cómic de Gaiman, Sueño es uno de los siete Eternos, entidades con un enorme poder que han existido desde siempre y que encarnan los conceptos básicos de la naturaleza viva. Son los vástagos de la Madre Noche y el Padre Tiempo, dos entidades cósmicas que representan la nada y el todo, respectivamente. De esta manera, nacieron soberanos y son siempre encargados de la propiedad de una fuerza de la que, técnicamente, son una manifestación física.
Sueño es el tercer hermano de siete, los cuales son, orden de nacimiento: Destino, Muerte, Sueño, Destrucción, Deseo, Desespero y Delirio. En inglés, los siete tienen nombres que comienzan con la letra D, que hace referencia a la D de Endless, que es Eternos en la lengua de Shakespeare. Aunque los siete rechacen ser considerados dioses, realmente se comportan como deidades y también pueden morir, lo que provocaría que se crease una variante para gobernar en cada uno de sus elementos.
Aunque la serie ha presentado a cuatro de los Eternos, es momento de hacer un repaso a los siete:
DESTINO
Es el mayor de los siete Eternos y, supuestamente, es el más poderoso. Toma la forma de un anciano ciego con túnica que lleva un libro. Tal y como su nombre indica, Destino encarna la noción del sino y, como tal, sabe todo lo que ha ocurrido y lo que sucederá. Aún no ha aparecido en la serie.
MUERTE
Es la segunda de los Eternos y, a pesar de su funesto nombre, la más agradable, lo que puede desconcertar dado su cometido. Muerte solamente se encuentra con los mortales en dos ocasiones en su vida: el día en el que nacen y en el que fallecen. Su labor es la de acompañar a las almas de la vida mortal a la del más allá. En la serie, está encarnada por Kirby Howell-Baptiste.
SUEÑO
Es el protagonista de la serie, conocido también como Morfeo y el tercero de los siete vástagos Eternos. Señor del reino de los sueños, encarna la imaginación y la creatividad, no solamente los sueños literales, lo que implica que tiene una de las habilidades más abstractas. A la hora de crear a Sueño, Gaiman se inspiró en su propio aspecto... y también en el cantante de The Cure. En la ficción, Tom Sturridge es el encargado de darle vida.
DESTRUCCIÓN O EL HIJO PRÓDIGO
Conocido también como el hijo pródigo, es el cuarto de los Eternos y hermano menor de Sueño. Suele tomar forma de un hombre pelirrojo. Es el único de los vástagos de la Madre Noche y el Padre Tiempo en haber abandonado sus deberes y responsabilidades, vive de manera oculta al mundo. Al contrario de sus hermanos, Destrucción cree que los Eternos también encarnan lo opuesto a lo que supuestamente representan. Aún no ha aparecido en la serie, pero se ha hecho referencia al mismo y a su desaparición.
DESEO
Es el Eterno al que nadie adora, a pesar de representar al amor y al placer, pero también la ambición y la codicia. Se asemeja a la deidad griega Hermafrodito, hijo de Afrodita y de Hermes, al poseer la habilidad de cambiar de sexo a placer. Deseo busca la caída de Sueño a lo largo de la serie y ejerce de figura antagónica respecto a sus hermanos. En la serie, Mason Alexander Park da vida al personaje.
DESESPERO
Desespero es la hermana melliza de Deseo y es la Eterna que representa la desesperanza, la aflicción y la tristeza. Vive en un vacío de espejos, apareciéndose a aquellos que sienten la verdadera desesperación. Donna Preston es la encargada de interpretar a Desespero en la producción de Netflix, donde ya se muestra dispuesta a colaborar en los pérfidos planes de Deseo.
DELIRIO
Es la más joven de los Eternos, la benjamina de los siete y es la clara representación de la tragedia. Anteriormente era conocida como Deleite, pero algo sucedió que la enloqueció y se transformó en la representación de la enajenación. En los cómics, suele ser representada como una mujer joven con cabello multicolor, pero su apariencia cambia constantemente, dependiendo de su estado de ánimo. En la serie, aún está inédita.