MADRID, 3 Abr. (CulturaOcio) -
La séptima temporada de The Walking Dead siguió demostrando la libertad creativa que separa al drama post-apocalíptico de la novela gráfica de Robert Kirkman en la que se inspira. El episodio 7x16 es la última demostración de las divergencias creativas que mantienen vivo el interés en ambas versiones de la misma historia.
((ATENCIÓN: ESTA NOTICIA CONTINE SPOILERS))
Sasha, al igual que Daryl Dixon, no existe en el cómic de Kirkman. No obstante, en la serie su personaje es un claro trasunto de Holly. Sasha y Holly, en la serie y la novela gráfica respectivamente, comparten un arco narrativo muy similar: las dos fueron amantes de Abraham, ambas se embarcan en una misión suicida para acabar con Negan... y las dos mueren a manos del carismático villano. O casi.
En la novela de Kirkman, Holly es asesinada por Negan, que envía posteriormente su cuerpo a Alexandria con una bolsa en la cabeza. Cuando Rick y los suyos se la retiran, una Sasha convertida en caminante muerde a Denise...
Mientras tanto, en la serie Sasha no muere literalmente a manos de Negan. En su lugar, fallece supuestamente de asfixia por estar atrapada en el ataúd al que le confinó el brutal propietario de Lucille. Y cuando irrumpe como una zombie, salta sobre él para intentar morderlo...
Sin duda, el giro de guión que introduce The Walking Dead a la historia de Sasha es genial y sirve como llama para encender la mecha que inicie finalmente la guerra total entre Negan y los sublevados. La popular serie de la AMC demuestra ser capaz de seguir siendo más o menos fiel a las viñetas, pero contando la historia a su manera.