MADRID, 6 Dic. (CulturaOcio) -
The Walking Dead introdujo el tenebroso Santuario de Negan a Carl en su último episodio. El personaje al que da vida Chandler Riggs, que se despidió de su inocencia en uno de los capítulos recientes, tuvo la oportunidad de asistir a un macabro tour por la comunidad de los Salvadores con un guía excepcional: el carismático villano interpretado por Jeffrey Dean Morgan.
((ATENCIÓN: ESTA NOTICIA CONTIENE SPOILERS))
Durante el trayecto, Carl vio un carrusel de horrores que acaban quebrándole emocionalmente como ya les ocurrió a Daryl y a Rick en ese mismo contexto antes que a él. Pero, ¿qué fue lo que ocurrió allí exactamente? El joven actor ha revelado a The Hollywood Reporter alguna de las claves de su visita y la importante misión que estaba emprendiendo:
"Carl quería matar a Negan. Desde el momento en que se fue, en el 7x05, sabía que era una misión suicida y no esperaba sobrevivir. Tampoco esperaba matar a Negan. Sabía que probablemente acabase siendo prisionero o asesinado. Aún así, Carl estaba dispuesto a sacrificar su vida para intentar matarlo".
No obstante, hubo un instante en el que Carl pudo matarlo... y se detuvo. Sobre esta cuestión, Riggs aclara:
"En ese momento, él solo dispone de un ojo y sabe que si dispara puede matar a uno de los Salvadores. Cuando mueren dos de ellos, entiende que nadie más necesita morir. En ese momento Carl siente que aquellas también son personas y es Negan el que realmente coordina todas sus malas acciones".
Precisamente, su dificultad de visión hace que de alguna manera Carl se vea emocionalmente arropado por la turbadora e inédita empatía mostrada por Negan:
"Cuando Carl se quita el vendaje del ojo, es un momento clave para él. Porque Negan es el primero que respeta su apariencia física así. Es algo que siempre le había dado vergüenza a Carl. Por eso en ese instante, Negan se gana el respeto de Carl. Aunque la siguiente escena en la que abrasa la cara de uno de los Salvadores vuelve a recordarle su misión allí".
UNA TEMPORADA APASIONANTE
Cada fin de semana se podrá seguir la séptima temporada, que está sorprendiendo a todos. La encrucijada en la que se encuentra Daryl, recluido con Los Salvadores, y Rick, obligado a servirles, son parte del giro que ha tomado The Walking Dead en su séptima temporada, que albergará rivalidades, muertes y luchas de poder.
No sólo la aparición de Negan y su grupo supone un cambio de rumbo para Rick y los suyos. En el segundo capítulo ya aparecieron El Reino, con el Rey Ezekiel y su terrible tigresa Shiva, que todavía no se sabe el papel que jugarán. A ellos sólo les conocen Morgan y Carol, y de momento parece un lugar bondadoso que también ha sido sometido por Los Salvadores, a los que rinden tributo alimenticio.
Por otro lado, cerca del mar Tara se ha tropezado con una civilización llamada Oceanic. En los próximos episodios, que se emiten los domingos en AMC, y con sólo media hora de diferencia en FOX, se verá qué importancia toma este nuevo grupo en la serie.
