MADRID, 11 May. (CulturaOcio) -
El octavo episodio del documental El último baile relató la experiencia de Michael Jordan en el rodaje de Space Jam, un capítulo que dejó imágenes inéditas detrás de las cámaras de la cinta. Compaginar su nueva faceta como actor con el baloncesto no fue fácil y su compañero Reggie Miller llegó a asegurar que el protagonista era "como un vampiro" durante la grabación.
Jordan se preparó para Space Jam entrenando en una cancha de baloncesto especial y totalmente equipada especialmente montada para la ocasión. "Dije: 'Mira, necesito entrenar, necesito una instalación en la que pueda hacer ejercicio'", cuerda la estrella del documental.
La filmación de la película, que también contó con Bill Murray y Wayne Knight, se desarrolló de lunes a sábado de las 07:00 a las 19:00 horas, y Jordan hacía un entrenamiento de dos horas a mediodía. Además, el atleta y otras estrellas de la NBA pasaban varias horas jugando en el set que le habían preparado al protagonista, por lo que el jugador apenas había tiempo libre.
Esos partidos fueron "algunos de los mejores", según relata Miller en el documental. "No sé cómo lo hizo. No sé cómo tuvo la energía para filmar todo el día y luego jugar tres horas. Jugábamos hasta las nueve o 10 de la noche, y además tenía que levantar pesas, y empezaba a trabajar como a las seis o siete de la mañana. El tío era como un vampiro", agregó.
Space Jam, cinta protagonizada por Jordan junto a los personajes animados de Looney Tunes, se estrenó en 1996 y recaudó más de 230 millones de dólares en todo el mundo. El filme tendrá una secuela en 2021 protagonizada por LeBron James, Sonequa Martin-Green y Don Cheadle.
